El presidente electo de los Estados Unidos, Donald Trump está renovando los desafíos infructuosos que ya hizo durante su primer mandato, como los EE. UU. comprarán Groenlandia a Dinamarca, sumándose a la lista de países aliados con los cuales está provocando conflictos, antes incluso de asumir el cargo el 20 de enero.
Primero fue Canadá, a quien ha sugerido que se convierta en el estado número 51 de los Estados Unidos, refiriéndose directamente al primer ministro canadiense, Justin Trudeau, como "gobernador del Gran Estado del Canadá". Trump va detrás del Canal de Panamá, reclamando que vuelva en manos estadounidenses, y ahora, quiere nuevamente Groenlandia.
Durante el anuncio de este domingo del nombramiento del embajador en Dinamarca, Trump aseguró que por motivos de Seguridad Nacional y Libertad en todo el mundo, los Estados Unidos consideran que "la propiedad y el control de Groenlandia son una necesidad absoluta". Las intenciones sobre Groenlandia se suman a las amenazas para "reanudar el control" del Canal de Panamá, si no se hace alguna cosa "por aliviar los crecientes costes de envío", requeridos para usar la vía fluvial que conecta el océano Atlántico y Pacífico.
La isla más grande del mundo no está en venta
Groenlandia es la mayor isla del mundo y se encuentra entre el Atlántico y Ártico. Está cubierta en un 80% por una capa de hielo y alberga una gran base militar estadounidense. Desde 1979 obtuvo su autonomía de Dinamarca, y su actual jefe de gobierno, Múte Bourup Egede, ya avisó de que las últimas amenazas de Trump para el control estadounidense serían "tan insignificantes" como las que hizo en su primer mandato.
En un comunicado, le ha recordado que la isla no está en venta. "Groenlandia es nuestra. No estamos en venta y nunca estaremos en venta", ha dicho el mandatario. "No tenemos que perder nuestra lucha de años por la libertad". Trump ya canceló una visita en el 2019 en Dinamarca, después de que Copenhague rechazó su oferta para comprar Groenlandia.
El pulso por el Canal de Panamá
Los Estados Unidos construyeron el canal al principio de 1900, pero cedieron el control en Panamá el 31 de diciembre de 1999, bajo un tratado firmado en 1977 por el presidente Jimmy Carter. Este fin de semana, Trump ha sugerido que los EE. UU. son "estafados" en el Canal de Panamá, y que exigirá que este sea devuelto a los Estados Unidos de América, íntegramente, rápidamente y sin preguntas", dijo el presidente electo.
La respuesta del presidente de Panamá, José Raúl Mulino, no tardó en llegar, y le respondió en un vídeo "que cada metro cuadrado del canal pertenece en Panamá y así seguirá", en un mensaje que Trump replicó a sus redes sociales con tono desafiador. "¡Ya veremos!". El presidente electo no se detuvo aquí y también publicó una imagen de una bandera estadounidense plantada en la zona del canal bajo la frase, "¡Bienvenidos en el Canal de los Estados Unidos!"