Hamás y la Yihad islámica están irrumpiendo en Cisjordania (Judea y Samària) aprovechando la división de la facción gobernante, Fatah. Así lo ha advertido un alto funcionario de Fatah, Jamal Tirawi, que ha asegurado que muchos activistas se han dirigido a los dos grupos radicalizados porque han perdido la confianza en sus líderes palestinos. "El liderazgo de Fatah ha creado un vacío y otros grupos palestinos se mueven para llenarlo, cooptando juventud", ha declarado este fin de semana. El alto funcionario ha atribuido el aumento de la popularidad del terrorismo islámico al hecho de que Fatah sigue perdiendo terreno ante Israel y el islamismo radical. La autoridad palestina habría perdido gran parte de su credibilidad entre los palestinos a causa de las operaciones de las fuerzas de seguridad del Estado de Israel en Cisjordania. Por todo eso, tal como ha explicado Tirawi en The Jerusalem Post, se espera una creciente escalada del conflicto y de la violencia en la zona.
"La relación entre el pueblo palestino y la autoridad palestina se ha visto gravemente minada. La gente ha perdido la confianza en la autoridad palestina, que se enfrenta a una situación muy vergonzosa, sobre todo con respecto a su rendimiento de seguridad", ha argumentado Tirawi. Es en este vacío de seguridad y de confianza que han irrumpido los terroristas de la Yihad y de Hamás para pescar simpatías y cooptar combatientes.
Pero no solo existe este factor externo, sino uno interno. La Autoridad Palestina tiene problemas internos a causa de los movimientos para relevar a Mahmud Abbas, a causa de su avanzada edad, lo que se agrava con la absencia de un Consejo Legislativo i de un sistema judicial palestino. El poder ejecutivo lo controla todo, "i eso ha llevado a sindicatos a convocar protestas y huelgas", ha indicado Tirawi. El Consejo Legislativo palestino está paralizado desde 2007, cuando Hamás tomó el control de la Franja de Gaza con un golpe de estado. Todo ello hace que a situación sea inestable en localidades como Nablús i Jenín, donde circulan personas armadas de los grupos más radicales.
Alto al fuego en Gaza
Israel y la Yihad islámica pactaron la semana pasada un alto al fuego mediado por Egipto. Se llegó a un acuerdo para liberar al líder terrorista Bassem Saadi, hecho que aplazó el anuncio del cese de los ataques. En el pacto firmado, El Cairo se compromete a ayudar en la liberación de Saadi además de Khalil Awawdeh. La detención del terrorista hizo estallar las tensiones entre Israel y la Yihad. Los terroristas amenazaron con atacar y provocó que Israel moviera ficha. Bloquearon los pasos de entrada en Gaza, que ha quedado prácticamente sin combustible, y decidió tirar una operación militar el viernes, que ha dejado ya una treintena de muertos, entre ellos dos líderes de la organización yihadista.
Por la otra banda, al menos tres israelíes, entre ellos dos militares, resultaron heridos por más de 700 cohetes disparados por la Yihad, la mayor parte de ellos interceptados por el sistema defensivo antimisil, la Cúpula de Hierro. Durante las negociaciones, Israel aceptó detener los ataques, pero la Yihad se negó. Hamás, que es a quien gobierna en Gaza, no participa en las conversaciones y no ha hecho declaraciones sobre el enfrentamiento actual en la Franja. Sin embargo, según The Jerusalén Puesto, habrían presionado para que los yihadistas acepten el alto el fuego. Hay que recordar que la Yihad Islámica, que tiene el apoyo de Irán, intenta arrebatar el poder de Hamás a la franja de Gaza.