Cuando solo quedan 23 días para las elecciones de Estados Unidos 2024, Kamala Harris ha aumentado la presión hacia el candidato republicano, Donald Trump, con la publicación de una evaluación médica donde se garantiza un "excelente estado de salud" de la vicepresidenta demócrata. El informe concluye que Harris "posee la capacidad física y mental para ejecutar las tareas de la Presidencia", entre las cuales está la Comandancia de las Fuerzas Armadas y envía un mensaje al candidato republicano, quien nunca ha compartido su historial médico.

Trump, de 78 años, ya se negó a facilitar cualquier información médica durante la campaña presidencial de 2016 y, ahora, a pesar de las constantes promesas de publicar un informe completo, sigue sin hacerlo. Así, Harris ha aprovechado para recuperar una vía de ataque hacia su rival a batir. Un alto funcionario de la campaña de la demócrata ha explicado en la cadena ABC News que, precisamente, la publicación de este informe, elaborado por el doctor de Harris, es visto como una "oportunidad de destacar la falta de transparencia de Trump y las preocupaciones sobre su edad". Una carta que, anteriormente, los republicanos habían utilizado contra el presidente Joe Biden.

¿Qué dice el informe de Harris?

De esta manera, Kamala Harris ha hecho público este sábado que no presenta ningún tipo de anomalía, más allá de "brotes alérgicos y urticaria", los cuales, según el escrito firmado por el médico personal de la vicepresidenta, Joshua Simmons, han mejorado "drásticamente" durante los últimos tres años. El informe detalla que ahora Harris, con 59 años, solo necesita utilizar un espray para la rinitis.

La evaluación médica, que se llevó a cabo en abril de este 2024, también incluye que la demócrata está al día de las mamografías y exámenes de colon, prestando especial atención a la segunda prueba, por su "destacado historial de cáncer a la familia de la candidata, por parte de madre."

 

Por el contrario, la última actualización de salud de Donald Trump llegó de manos de su médico este último mes, cuando se limitó a indicar que disfruta de una salud "excelente" y que los exámenes cognitivos del expresidente eran "excepcionales", si bien no aportó ninguna prueba médica.

Curiosamente, la salud de los candidatos había sido uno de los temas candentes al inicio de la campaña electoral, con ataques constantes de los republicanos hacia Joe Biden por su avanzada edad y los constantes lapsus que sufría. Pero cuándo el presidente estadounidense decidió retirarse de la carrera electoral, pasó a segundo plano y no ha sido hasta ahora que Harris ha hecho revivir el debate, esta vez para cargar contra Trump.