Hashem Safieddine, candidato a suceder a Hassan Nasrallah como líder de Hizbulá, está "ilocalizable" desde este viernes, según ha informado una fuente de seguridad libanesa a la agencia Reuters. El hombre considerado el número 2 de Hizbulá habría sido el objetivo de un bombardeo israelí en el suburbio sur de Beirut lanzado la noche del jueves al viernes pasado, según fuentes israelíes citadas por Axios. La falta de contacto con Safieddine, que en el momento del ataque se encontraba en un búnker subterráneo, ha hecho saltar las alarmas en el seno de la organización chií, pero todavía no se ha confirmado si Israel ha conseguido su objetivo o si ha sobrevivido. Según apunta la fuente libanesa mencionada, los ataques israelíes en el suburbio de Beirut conocido como Dahiyeh, que todavía continúan, han hecho imposible hasta ahora que los equipos de rescate registren el sitio.
Safieddine nació en 1964 en una población en el sur del Líbano próxima a Tiro, y es primo de Nasrallah. Los dos estudiaron teología en el Irán al principio de los 1980, y compartían la misma visión crítica contra Israel y los Estados Unidos. Safieddine es el jefe del consejo ejecutivo de Hizbulá, órgano que supervisa los asuntos políticos, hecho que lo convierte en un alto funcionario de la organización, y también es miembro del consejo de la Yihad, el órgano militar del grupo. Igual que Nasrallah, es un clérigo y lleva el turbante negro que le otorga estatus como descendiente del profeta Mahoma. En caso de confirmarse su muerte, Hizbulá tendría que buscar a un nuevo líder en medio de una gran crisis, y bajo la amenaza de nuevos posibles ataques de Israel contra sus miembros.
Israel avisa de que "no dará respiro" a Hizbulá
El jefe del Estado Mayor del Ejército de Israel, Herzi Halevi, ha asegurado que mantendrán la presión sobre Hizbulá en el Líbano. "Tenemos que seguir aplicando presión sobre Hizbulá y hacer daño adicional y continuo al enemigo, sin concesiones y sin dar respiro a la organización", ha afirmado Halevi en unas declaraciones difundidas por las fuerzas armadas israelíes. En otra declaración, el portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), Daniel Hagari, ha afirmado que han destruido 2.000 objetivos de Hezbollah y han asesinado a 440 miembros del grupo chií.
Desde el martes de madrugada, el ejército israelí mantiene una serie de incursiones terrestres en el sur del Líbano que se suman a la intensa campaña de bombardeos contra el país iniciada hace más diez días, y que hasta ahora deja más de 2.000 muertos y unos 1,2 millones de desplazados. Este sábado ha atacado una mezquita próxima a un hospital en la localidad de Bint Jbeil, al este, y en los suburbios del Dahieh. Además, por primera vez desde 2006, el estado hebreo ha bombardeado la ciudad de Trípoli, en el norte del Líbano, donde ha matado un miembro del brazo armado de Hamás en el país. En un ataque separado en otro punto del país que el ejército no ha revelado, ha muerto otro cargo de la organización islamista.