La Unión Cristianodemócrata (CDU) y el Partido Socialdemócrata (SPD) llegaron este viernes a un acuerdo con los Verdes para una reforma de la Constitución alemana que haga posible un importante aumento del gasto en defensa. El compromiso con los Verdes era necesario para alcanzar el martes que viene una mayoría de dos tercios a la 'vieja' cámara baja del Parlamento que se requiere para una reforma constitucional. El acuerdo ha sido posible in extremis en negociaciones nocturnas y matutinas, después de que los ecologistas rechazaran la víspera en el primer debate sobre el gran plan de gasto de conservadores y socialdemócratas después de la última oferta del líder de la CDU y probable próximo canciller, Friedrich Merz, del jueves.

La víspera al pleno extraordinario de la cámara baja Merz propuso a los Verdes destinar a la protección del clima 50.000 millones de euros de un futuro fondos especiales de 500.000 millones de euros para modernizar la anticuada infraestructura alemana y que serán financiados con créditos no sometidos al freno de la deuda. Eso se posibilitará mediante una reforma de la Constitución. Pero los ecologistas no se fiaban de la palabra del líder conservador y exigían mencionar la palabra gasto adicional para el clima, específicamente a la Ley Fundamental.

¿Cómo se ha llegado a este acuerdo histórico?

El acuerdo ha sido finalmente posible después de que Merz duplicara a 100.000 millones de euros el dinero destinado a la protección del clima y mencionar esta posibilidad en la Constitución. Esta dotación será transferida al llamado Fondo de Clima y Transformación creado por el gobierno saliente. Además, el compromiso estipulará que un 10% del presupuesto ordinario tiene que estar dedicado a inversiones.

"Hemos pasado muchas horas juntos buscando una fórmula de que nos permitiera tanto a nosotros como al SPD y los Verdes acudir con una buena conciencia a la votación de la semana que viene", ha dicho Merz en una comparecencia ante los medios en la cámara baja. Todas las inversiones que "se hagan para conseguir la neutralidad climática no se verán afectadas por el freno de la deuda. Y se pueden financiar con 500.000 millones en un periodo de 12 años", ha afirmado Merz, que recalcó que "es una suma enorme". Se trata de un gasto de más de 40.000 millones el año, ha explicado.

El pacto sobre el fondo especial de infraestructura -y ahora también clima- era necesario para conseguir aprobar en un solo paquete legislativo también una reforma constitucional del freno de la deuda, que limita actualmente el endeudamiento del Estado al 0,35% del producto interior bruto (PIB) anual, de manera que ahora el gasto defiende que supere el 1% del PIB (unos 43 millones). El compromiso conseguido especifica que la excepción en el freno a la deuda no incluya solo el presupuesto estrictamente militar, sino también otros gastos relacionados con la seguridad, como los servicios secretos, la protección civil y las ayudas financieras a países agredidos, en clara alusión a Ucrania.

"Hay un claro mensaje a nuestros socios y amigos, y también a nuestros enemigos de nuestra libertad. Somos capaces de defendernos y estamos también completamente preparados para defendernos", ha recalcado el líder conservador. No faltarán recursos financieros para defender la paz a nuestro continente, ha enfatizado, y ha subrayado que "Alemania ha vuelto", ya que el Gobierno de coalición que CDU negocia con el SPD "hará una gran contribución a la libertad de Europa".

¿Cuáles son los planes de reforma pactados?

Los planes de reforma pactados por conservadores y socialdemócratas también destinarán 100.000 millones de euros del fondo especial para infraestructuras en los estados federados y otra reforma para permitir a los 16 estados federados endeudarse un 0,35% del PIB. La norma vigente exige a los estados federados presupuestos equilibrados. Las medidas tienen que ser votadas el martes que viene a la cámara baja en segunda y tercera lectura, y posteriormente pasar en la cámara alta, donde están representados los estados federados.

La urgencia de un compromiso se derivaba del hecho de que el 25 de marzo próximo se constituirá en Alemania la nueva cámara baja salida de las elecciones generales del 23 de febrero, en que socialdemócratas y conservadores necesitarían ya no solo el apoyo de los Verdes, sino también de la Izquierda, que se opone a un aumento del gasto defiende de esta manera. Otra alternativa habría sido hacerlo con el apoyo de la ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD), que será la principal fuerza de la oposición al nuevo Hemiciclo, pero esta posibilidad queda descartada a causa del cordón sanitario impuesto por los otros partidos a esta fuerza.

De todos modos, ahora todas las miradas están puestas en las demandas interpuestas por AfD, La Izquierda y la Alianza Sahra Wagenknecht (BSW) ante el Tribunal Constitucional para conseguir la anulación de las sesiones extraordinarias al 'viejo' Bundestag hermano.