Hizbulá no ha dejado ninguna duda y ha confirmado lo que ya había anunciado el ejército israelí, que el líder de la milicia xii, Hasan Nasrallah, murió en el bombardeo del pasado viernes. Nasrallah está ahora con Alá como gran mártir. Se suma a la caravana de mártires de Kerbala y los mártires inmortales cuya marcha ha liderado durante treinta años de victoria en victoria", ha indicado en un comunicado publicado por la televisión Al Manar, aunque no menciona las circunstancias de su muerte. En el comunicado, se acuerda de que Nasrallah tomó las riendas del partido en 1992 y que lo llevó a la "liberación del Líbano en el 2000" y al final de la ocupación israelí del sur, "la victoria del 2006". La milicia xiita libanesa asegura que esta muerte no impedirá continuar la lucha contra Israel. "La dirección de Hizbulá seguirá con su yihad contra el enemigo en apoyo|soporte de Gaza y Palestina, en defensa del Líbano", ha subrayado el grupo. Después del anuncio, la cadena Al Manar ha emitido ruegos y ha dejado de dar información en directo sobre los bombardeos israelíes sobre el Líbano.
Irán reacciona con el líder supremo
La noticia una vez confirmada, ha sacudido el Oriente Próximo y la comunidad internacional por|para las consecuencias que puede tener en la escalada del conflicto. El Irán, Irán, acérrimo enemigo de Israel, ha sido uno de los primeros a reaccionar, y lo ha hecho de manera solemne, a través del mismo líder supremo. Ali Khamenei, ha instado a los musulmanes del mundo a dar apoyo Hizbulá y a luchar contra Israel. "Es obligatorio que todos los musulmanes den apoyo con orgullo al pueblo del Líbano y a Hizbulá con sus recursos y lo ayuden a enfrentar el régimen usurpador, crueles y malvados (Israel), ha afirmado el líder supremo de Irán en un comunicado publicado a su página web. "La matanza de personas indefensas en el Líbano reveló una vez más a todos la ferocidad del perro rabioso sionista y demostró la miopía y la política estúpida de los líderes del régimen usurpador (Israel)", ha afirmado la máxima autoridad de Irán. Khamenei ha advertido que el pueblo libanés hará que "el agresor y el malvado enemigo" se arrepienta y añadió que el destino de esta región lo decidirán las fuerzas de resistencia encabezadas por Hizbulá. "La banda|lado terrorista que gobierna el régimen sionista (Israel) no aprendió de su guerra criminal de un año en Gaza y no entendió que la matanza masiva de mujeres, niños y civiles no puede afectar a la sólida estructura de la resistencia y no destruirla", ha sentenciado Khamenei.
Eliminado un sub comandante iraní en Beirut
Además, medios iraníes han informado de que en el bombardeo del viernes falleció un sub comandante de la Guardia Revolucionaria iraní, Abbas Nilfrushan, de 58 años, en el mismo ataque que le costó la vida al líder de la milicia de Hezbolá, Hasan Nasrallah .“El general de brigada Abbas Nilfrushan murió en el ataque de Israel contra Beirut, junto al líder de Hezbollah Hassan Nasrallah”, informó la agencia Mehr, y también la agencia iraní IRNA.
Reunión de urgencia del Consejo de Ministros libanés
El Consejo de Ministros del Líbano celebrará una sesión extraordinaria esta tarde para analizar la situación en el país, después de la campaña de bombardeos israelíes de esta madrugada y del ataque con el que Israel dice haber matado al líder del grupo chií Hezbolá, Hasán Nasrala. "El Gabinete celebrará una sesión extraordinaria a las 19:30 (16.30 GMT) de hoy, sábado 28 de septiembre, en Palacio de Gobierno, para abordar los últimos desarrollos", anunció la presidencia del órgano en un comunicado.
La oficina del primer ministro libanés, Najib Mikati, ya adelantó anoche que el dirigente había decidido poner fin a sus reuniones en el marco de la Asamblea General de la ONU en Nueva York y regresar a Beirut "a la luz de los desarrollos en el Líbano tras la agresión israelí contra los suburbios sur de la capital". El viernes por la tarde, un bombardeo israelí de intensidad sin precedentes hizo derrumbarse varios edificios en el extrarradio capitalino, bajo los que el Estado judío asegura que se encontraba la sede central de Hezbolá y donde afirma haber matado a su máximo líder.