Cuba sin luz. Estos son algunos de los efectos visibles que ha dejado el huracán Ian a su paso por la isla, mientras los residentes de Florida se preparan para la llegada de una catastrófica tormenta de categoría 4.
El extremo occidental de Cuba fue engullido por vientos violentos e inundaciones el martes, un hecho que ha afectado a la infraestructura, según los medios estatales, mientras que algunas de las plantaciones de tabaco más importantes han quedado devastadas completamente. El Sindicato Nacional de Electricidad de Cuba ha dicho que la energía iría volviendo gradualmente el martes por la noche y miércoles por la mañana.
La red eléctrica de la isla, que tiene décadas de antigüedad, ha estado fallando durante meses, con apagones comunes, pero las autoridades han expuesto que la tormenta había sido demasiado y habría provocado una fallo que apagó las luces para los 11,3 millones de habitantes.
El peor momento para Cuba
El huracán golpeó Cuba en un momento de grave crisis económica. Es probable que los apagones y la prolongada escasez de alimentos, medicamentos y combustible compliquen los esfuerzos por recuperarse de la tormenta. Varios testigos habrían expuesto que Ian ha llegado en el peor momento y que ha sido "un desastre horrible".
La poderosa tormenta se dirige directamente a la costa suroeste de Florida, después de golpear en Cuba con vientos de 205 km/h. Se espera que la tormenta se intensifique a medida que avanza sobre el golfo de México y el oeste del extremo sur de Florida el martes por la noche, antes de dirigirse hacia la región de la Bahía de Tampa.
Puerto Rico continúa a oscuras
El restablecimiento del servicio eléctrico en Puerto Rico después del huracán Fiona avanza con lentitud y no llegará a entre el 77% y el 90% de los abonados hasta el viernes que viene, según las estimaciones de la empresa encargada de la transmisión, LUMA Energy. Según un comunicado del consorcio, se podría restablecer el servicio de más del 64-77% de los clientes este miércoles y del 77-91% para el viernes que viene.
Estas cifras estimadas dependen, sobre todo, de la disponibilidad de generación, la necesidad de contar con reservas de energía suficientes para estabilizar y proteger toda la red eléctrica y las evaluaciones de daños, entre otros factores, ha indicado LUMA. Lunes, más de una semana después del paso del huracán, 869.279 abonados de un total de más de 1,4 millones tienen luz, aproximadamente el 59%. Por lo tanto, un 41% restan sin.
Por otra parte, el gobernador de Puerto Rico, Pedro Pierluisi, ha anunciado este martes que ya todos los municipios de la isla fueron incluidos en una nueva enmienda a la Declaración de Desastre Mayor para que los residentes reciban ayuda federal después del paso del huracán Fiona.