Competición entre militares y falta de personal. Estos son los dos problemas del ejército ruso identificados por el servicio de inteligencia británica en su último informe sobre la guerra en Ucrania. Según han explicado en Twitter, el temido grupo de mercenarios Wagner habría dejado de reclutar reclusos de las prisiones rusas para participar en la invasión del país vecino, supuestamente después de que empezaran a llegar las primeras noticias de la dura realidad del frente ucraniano. Además, la Defensa del Reino Unido cree que las tensiones entre el Grupo Wagner y el ejército de Rusia sobre quien se anota más victorias en el campo de batalla habría contribuido a la extinción de este programa de reclutamiento. Sea como sea, los británicos consideran que el presidente Vladímir Putin sufre un grave problema entre sus filas que lo obligarán, o bien a renunciar a todavía más objetivos militares en Ucrania, o a buscar la manera de movilizar a más soldados sin despertar de nuevo el rechazo de la población rusa.
Rusia y el problema del Grupo Wagner
En el informe sobre la guerra publicado este mismo sábado, la inteligencia británica señala que "el 09 de febrero de 2023, el jefe del Grupo Wagner, Ievgueni Prigozhin, declaró que habían parado su plan de reclutamiento de prisioneros", aunque la tendencia ya iba ningún a la baja desde diciembre de 2022. La explicación de eso, según la Defensa del Reino Unido, son "las noticias de las duras realidades del servicio de Wagner en Ucrania", las cuales "probablemente se han filtrado a los reclusos y han reducido el número de voluntarios" para luchar a cambio de ser indultados. Además, consideran "clave en el fin de este sistema la rivalidad cada vez más evidente entre el Ministerio de Defensa ruso y el Grupo Wagner", aunque, según varias informaciones, el ejército dependería en gran parte de los mercenarios de Prigozhin, que no han parado de criticar el mando militar ruso, y que Moscú incluso habría hecho ver que el éxito de los Wagner era suyo.
Faltan soldados en el ejército ruso
Por otra parte, los británicos creían que "el ejército ruso probablemente también ha desplegado a la gran mayoría de los reservistas" que se reclutaron durante la "movilización parcial" del pasado otoño, que ya provocó el rechazo de la población rusa y desencadenó en protestas que no se veían en el país desde hacía mucho de tiempo. Ante la falta de hombres para luchar en Ucrania, alerta la Defensa del Reino Unido, "los dirigentes rusos se enfrentan a la difícil elección de seguir agotando sus fuerzas, minimizar sus objetivos o poner en marcha una nueva tanda de movilización".