Siete décadas ostentando el trono del Reino Unido, un récord de longevidad, que desde este domingo, la reina Isabel II tiene el honor de ser la única monarca británica al alcanzar. El 70.º aniversario de su reinado frente de la monarquía británica llega en un contexto complicado para la reina: la reciente muerte de su marido, el caso de abusos sexuales a menores protagonizado por su hijo, el príncipe Andrés, y su propia salud, son los elementos que marcan este aniversario. Sin embargo, está planificada una gran celebración que recibe el nombre de jubileo de platino, el cual tendrá lugar en primavera.
Hoy, la reina de Inglaterra estará en su residencia de Sandringham, sin grandes celebraciones, ya que esta la esperan en unos meses. Esta fecha para Isabel II rememora dos acontecimientos: la muerte de su padre, el rey Jorge VI, 1952, y su ascenso al trono con 25 años. A este recuerdo agridulce, este año se le suma que será su primer aniversario de reinado sin su marido, Felipe de Edimburgo, quien murió en abril del 2021 con 99 años.
Siete décadas de grandes acontecimientos
Después de 70 años ostentando el trono del Reino Unido, Isabel II acumula una larga lista de acontecimientos históricos que ha presenciado ha participado directamente. Ha tenido 14 primeros ministros, desde Wiston Churchill en el actual Boris Johnson. Ha sido testigo de la entrada y la salida de su país en la Unión Europea. Guerras, catástrofes naturales y protestas, se han sucedido delante de tus ojos. Sin embargo, a menudo los acontecimientos que más han marcado su imagen pública han sido los relacionados con su familia.
La casa Windsor se ha marcado a sí misma por los escándalos que han protagonizado sus miembros. La fama de los Widnsor precede a la llegada de Isabel II al frente de la familia. Su tío David, heredero del trono, abdicó para casarse con una mujer americana divorciada, Wallis Simpson. Este fue el pistoletazo de salida a décadas de polémicas con la familia real y sus actos. Todo llegó a su punto máximo en el matrimonio y posterior divorcio de su hijo Carles de Inglaterra y la princesa Diana de Gal·les.
Los escándalos no se acabaron después de la explosión mediática que fue el divorcio de Carles y Diana. Actualmente, el principal frente abierto de la familia real es otro hijo de la reina Isabel: el príncipe Andrés. El alcance de las acusaciones de agresión sexual contra el príncipe Andrés, presentadas por la norteamericana Virginia Giuffe, que asegura que abusó cuando tenía 17 años, ha obligado a la reina a retirarle a su hijo títulos militares honoríficos, así como el trato de "Alteza Real". Después de consultar con su hijo mayor y heredero, el príncipe Carlos, y su nieto el príncipe Guillermo, según los medios, la reina optó por apartar al príncipe Andrés, cuya amistad con el empresario Jeffrey Epstein, procesado por abuso de menores, ha tenido un impacto a la familia real británica, según recopilación Efe.
Oportunidad republicana
Los Windsor siguen reinando, a pesar de estas y otros escándalos, pero el futuro final del reinado de Isabel II espolea a los republicanos ingleses. El movimiento republicano del Reino Unido se ha puesto en alerta para pasar a la acción al crepúsculo del reinado de Isabel II, que este domingo se convierte en la monarca británica más longeva con 70 años en el trono.
Con el eslogan "No 70 más. Es la hora de la república", la organización Republic, representando de este colectivo, prepara una campaña de cara a las celebraciones del Jubileo de Platino, con la meta de "desmitificar la monarquía e impulsar el debate sobre un modelo constitucional alternativo", ha asegurado Graham Smith, líder de la organización, en declaraciones en Efe. La entidad considera que la futura sucesión de la reina para|por su hijo, que recuerdan: "no gusta a todo el mundo", puede abrir una puerta a debatir sobre el modelo de estado inglés.