La guerra entra en una nueva fase, así lo han afirmado este miércoles las autoridades de Israel. El ministro de Defensa, Yoav Gallant, ha manifestado que el foco de Israel se ha trasladado ahora al frente norte y ha dicho textualmente que empieza una "nueva fase" de la guerra. "El centro de gravedad se mueve hacia el norte. Estamos desviando fuerzas, recursos y energía hacia el norte", ha avisado Gallant al personal de la Fuerza Aérea Israelí en la base aérea Rebaño David, en declaraciones publicadas por su oficina y que recoge el diario The Israel Times.

Este miércoles, la 98.ª división de las FDI se ha desplegado en el norte de Israel, después de luchar durante meses en la Franja de Gaza. "Creo que estamos al inicio de una nueva fase en esta guerra y nos tenemos que adaptar", ha apuntado a Gallant. "Necesitaremos coherencia a lo largo del tiempo, esta guerra requiere gran coraje, determinación y perseverancia".

El ministro ha afirmado que los objetivos de guerra de Israel al norte son "claros y sencillos: devolver a los residentes de las ciudades del norte en sus casas con seguridad". "No hemos olvidado a los rehenes y no hemos olvidado nuestras tareas en el sur. Este es nuestro deber y lo estamos cumpliendo al mismo tiempo", ha reiterado Gallant. Israel no ha reconocido abiertamente la autoría de los dos ataques masivos que se han producido el martes y miércoles al Líbano, causando al menos nueve muertos y 300 heridos.

El aviso del secretario general de la ONU

Aunque todavía no ha habido grandes pronunciamientos de potencias internacionales, el secretario general de la ONU, António Guterres, ha dicho que es importante que los objetivos de estos ataques inéditos no sea población civil. Guterres ha expresado su preocupación por una escalada bélica en el Líbano.

Una serie de nuevas explosiones se han sentido en la capital del Líbano este miércoles, al día siguiente del masivo ataque hecho a través de dispositivos buscapersonas, ha adelantado Sky News, citando testigos presenciales. Pocos minutos después, los medios estatales han informado de al menos nueve muertos y 300 heridos. La agencia Reuters ha informado de explosiones de aparatos walkie-talkies de Hizbulá al sur del país -en ciudades como Nabatieh, Tir y Sidó- y en algunos barrios de Beirut. Al menos una de las explosiones que se ha sentido se ha producido cerca de un funeral organizado por una de las víctimas del ataque del martes. El balance de muertos ha aumentado y ya son 21 las víctimas mortales desde ayer, aparte de los más de 3.000 heridos.