ÚLTIMA HORA | Sigue el minuto a minuto del conflicto Rusia - Ucrania
Son muchos los ucranianos que se han marchado del país como consecuencia de la invasión rusa. Otros, sin embargo, han optado por quedarse en el país y ayudar de la manera a que puedan a frenar el paso de los rusos en su territorio. Algunos están apuntados en una lista de reserva secundaria porque hoy por hoy, según informan varios testimonios, se da prioridad a la gente que tiene algunas nociones o ha pasado ya por el ejército. Otros, desarrollan tareas en refugios, controlando quién entra y quién sale, para evitar ataques y también de cargar comida y estar al corriente de las provisiones.

"No espero moverme porque es muy complicado ahora mismo. Hace un rato he escuchado algunas explosiones, lejos, pero cerca, ¿sabes"?. Ivan es informático y ha hecho una pequeña pausa para poder hablar con ElNacional.cat. "Desde aquí puedo intentar trabajar, en un sótano o en el metro no puedo hacer nada, es otra manera de ayudar". Por motivos de seguridad, no comparte exactamente el qué hace, aunque comenta que las noches sí que las pasa en el sótano. Si durante el día suenan las sirenas, "vamos corriendo hacia el lavabo, está más protegido, lejos de las ventanas, y hay diferentes paredes que ofrecen más protección".

"Supuestamente, Rusia quería atacar infraestructuras de nuestro país, pero ahora también ataca edificios de civiles. Cerca de aquí hay 67 kilómetros de vehículos militares rusos. Creo que tenemos todos miedo, pero confiamos y creemos en nuestro ejército. Vemos que el mundo nos ayuda". Y subraya: "Es muy diferente de Donetsk, allí algunos querían quedarse, otros marcharse...". Y es que Ivan es y vivía en Donetsk hasta el año 2014. De hecho, sus padres todavía viven allí. La escalada del conflicto hizo que decidiera marcharse.

Bombardeo en la ciudad de Khàrkiv, la segunda ciudad del país / Efe

"Entendí que Rusia era una invasora, y su propaganda. ¿Cómo puede hablar de nazis en pleno siglo XXI? Decidí ir a mi país y dejar atrás la situación. Era muy difícil, salías y te chocabas con tropas rusas, que capturaron edificios del gobierno. Decidimos marcharnos. Algunos de mis amigos fueron a Rusia, no sé por qué. Supongo que nadie sabía demasiado qué hacer, se buscaba huir".

Los padres, en Donetsk

"Mis padres están allí, tienen 70 años, no los veo nunca. La frontera está cerrada, sobre todo a consecuencia del coronavirus, pero ya antes era complicado. Solo hablamos por Skype y ellos no quieren marcharse, lo tienen todo allí", detalla. "Hace unos días me dijeron que la situación era complicada, que había ataques. No sé qué debieron atacar". "Estoy muy preocupado por la situación, por como acabará todo. En Rusia todo el poder es de Putin, no hay libertad de prensa", insiste.

Checkpoint ruso en Lugansk / Efe

De momento, fuera del ejército

Ivan relata que de momento está fuera de los grupos de defensa. "Me quise apuntar, pero ya estaban llenos, no había disponibilidad". Le dijeron que si lo necesitaban, ya lo llamarían. "Hemos decidido ayudar en otros lugares. Hay chats de voluntarios, todo el mundo quiere ayudar e ir a comprar cosas para los otros y contribuir de alguna manera. La red es sólida. Estamos todos muy conectados", concluye.

 

Imagen principal: un soldado en el centro de Kíiv / Efe