La Asamblea Nacional francesa ha aprobado este miércoles la moción de censura presentada por el Nuevo Frente Popular contra el primer ministro Michel Barnier, convirtiéndose así en el ejecutivo más efímero de la quinta república. La iniciativa ha llegado hasta los 331 votos para echar al conservador como respuesta al intento de aprobar la ley de financiación de la Seguridad Social sin votación en la cámara baja, mediante la invocación del artículo 49.3 de la Constitución francesa. La iniciativa ha llegado al apoyo necesario gracias a una alianza excepcional entre los grupos de izquierda y extrema derecha. Con esta votación, Barnier queda en funciones y Francia se adentra en un periodo de incertidumbre política, con la mirada puesta en el presidente de la República Francesa, Emmanuel Macron, para ver cuál será su próximo movimiento.

Durante la sesión, que ha culminado con la confirmación de la moción de censura, la líder del partido de extrema derecha Agrupación Nacional, Marine Le Pen, ha dicho que la peor manera de hacer política "sería no parar a este presupuesto, a este gobierno." La política ha añadido que "el presupuesto que rechazamos es lo contrario a una política pensada". "Solo has dado una respuesta: impuestos, impuestos, siempre impuestos", ha sentenciado la líder de la ultraderecha francesa, en referencia al proyecto de ley de presupuesto de seguridad social presentado por Barnier. Boris Vallaud, el líder del Partido Socialista, que forma parte de la coalición de izquierda del Nuevo Frente Popular, ha señalado que la moción de censura implica que "los socialistas tienen que actuar responsablemente para contribuir en la formación de un nuevo gobierno". Por otra parte, el líder de Los Republicanos, Laurent Wauquiez, se ha opuesto a la iniciativa porque "solo hay dos opciones posibles: la elección de la responsabilidad o la elección del caos".

La moción de censura llega después de que Barnier invocara este lunes el artículo 49.3 para aprobar el proyecto de ley de financiación de la Seguridad Social sin votación en la Asamblea Nacional. Tanto la izquierda como la derecha anunciaron inmediatamente su intención de presentar una moción de censura contra el primer ministro. La diputada de la Francia Insumisa Mathilde Panot, denunció el "caos político" y dijo que "no es posible que en una democracia gobiernen los que han perdido las elecciones", en alusión a los comicios legislativos de julio, en los que el Nuevo Frente Popular de izquierdas salió como el bloque más votado. Por su parte, Marine Le Pen ya había anunciado que, al margen de la moción que ha presentado su formación, daría apoyo a otras iniciativas, "vengan de donde vengan". Y eso es lo que ha pasado finalmente, Le Pen ha votado a favor de la moción presentada por la coalición de izquierdas. Asimismo, durante la sesión de este miércoles, Le Pen ha asegurado que su bancada política votará para aprobar una "ley especial" para evitar el colapso del gobierno y garantizar que haya un presupuesto para el 2025.

Después de la caída del gobierno de Barnier, Macron se dirigirá a los franceses este jueves a las 20 horas. Ahora, el presidente tiene varias opciones en encima la mesa. Por la derecha, podría volver a presentar a Barnier como primer ministro o a otro político conservador. Por la izquierda, el presidente francés podría escoger a alguien como el exprimer ministro socialista Bernard Cazeneuve, el cual ya estuvo a la lista de candidatos en septiembre. También hay rumores sobre Sébastian Lecornu, el actual ministro de Defensa, o François Bayrou, una figura respetada en el centro político francés. Si ninguna de las opciones prospera, Barnier seguirá en funciones hasta julio del 2025, momento en que se podrá disolver la Asamblea Nacional y convocar elecciones, un año después de las últimas.

Una larga lista de intentos de moción de censura

Desde el inicio de la quinta república francesa, en el año 1958, se han sometido a votación un total de 67 mociones de censura. De todos modos, hasta la propuesta de este miércoles, solo una había prosperado. Fue en 1962, cuando la Asamblea derrocó el gobierno de Georges Pompidou, bajo la presidencia de Charles de Gaulle. El motivo fue el anuncio de una "revolución institucional" en la que la jefatura del Estado sería escogida por el voto popular y no por las cámaras francesas. Durante el periodo de Emmanuel Macron, desde 2017, los cinco primeros ministros del presidente se han enfrentado a doce mociones de censura, siendo Barnier el primer desbancado.