El jefe del gobierno de Hamás en la Franja de Gaza, Essam Al-Dalis, ha muerto por los ataques aéreos israelíes en el territorio palestino que han roto el alto el fuego. Según informa Le Monde, el nombre de Al-Dalis se incluye en una declaración de pésame publicada por la milicia islamista. Al-Dalis no es el único “líder del gobierno de Gaza” que Hamás ha dado por muerto en este mensaje de pésame. Entre los fallecidos se encuentran, además, Ahmed al Hatta, viceministro de Justicia, Mahmud Abu Wafah, viceministro de Interior, y Bahjat Abu Sultan, un alto funcionario del Ministerio del Interior, recoge el comunicado.

Al menos 404 palestinos han muerto este martes a causa de los bombardeos de Israel sobre Gaza, que ha empezado de madrugada rompiendo con el alto el fuego, ha confirmado el director de la unidad del Ministerio de Sanidad de la Franja a cargo del recuento, Zaher al-Waidi. En un comunicado posterior, la Sanidad gazatí, perteneciente al gobierno de Hamás, ha añadido que los ataques dejan hasta ahora a 562 heridos. Estas cifras solo incluyen a las víctimas mortales y otras víctimas que han llegado a los hospitales y excluyen a las decenas de afectados que continúan entre los escombros o a los que las ambulancias todavía no han podido acceder.

Hamás también señala a EE.UU.

Además, el grupo islamista afirmó que el hecho de que Estados Unidos haya reconocido que fue informado previamente por Israel de la reanudación de los ataques a Gaza “confirma su complicidad directa en la guerra de exterminio” contra el pueblo palestino y “su responsabilidad por las matanzas y el asesinato”.

“Esta admisión revela una vez más la flagrante colusión y parcialidad de Estados Unidos con el ocupante (Israel), y expone la falsedad de sus afirmaciones sobre su compromiso de calmar la situación”, ha afirmado Hamás a través de las redes sociales. Es por ello, que la milicia islamista ha sentenciado que “Washington, con su apoyo político y militar ilimitado al ocupante, tiene plena responsabilidad por las masacres y el asesinato de mujeres y niños en Gaza”. Hamás y Estados Unidos llegaron a tener conversaciones directas sobre la continuación del alto el fuego y el grupo islamista ofreció liberar a un rehén americano-israelí cautivo en Gaza vivo y otras cuatro muertes.

Tras el bombardeo israelí que rompió el alto el fuego, Hamás también instó a “la comunidad internacional a adoptar medidas urgentes para exigir responsabilidades de la ocupación, y a quienes la apoyan, por estos crímenes contra la humanidad”.