El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, ha arrasado este sábado en las primarias demócratas de Carolina del Sur, en una cita que marca el inicio del hito del partido para las elecciones de noviembre y que es particularmente importante para evaluar el nivel de entusiasmo de la comunidad afroamericana. Con el escrutinio casi en el completo, Biden ha conseguido la victoria en Carolina del Sur con el 96,2% del voto y ha dejado muy por debajo a sus dos principales rivales: la autora de libros de autoayuda Marianne Williamson (2,1%) y el congresista de Minesota Dean Phillips (1,7%).
En un comunicado, Biden ha afirmado que Carolina del Sur, donde dio impulso a su campaña en las primarias de 2020, lo ha vuelto a situar "en el camino" para ganar las elecciones del país norteamericano el próximo noviembre y hacer que el exmandatario Donald Trump (2017-2021) sea de nuevo a un "perdedor". Aunque Biden no se encuentra en estos momentos en Carolina del Sur para celebrar la victoria, en el último mes, ha visitado tres iglesias de la comunidad negra en el estado y ha gastado centenares de miles de dólares en anuncios en radio y televisión para llegar a los votantes afroamericanos.
Baja un 75% la participación
Con la victoria asegurada, el verdadero desafío de Biden consistía en demostrar su capacidad para movilizar la base del partido, especialmente la comunidad afroamericana, que representa el 60% del electorado demócrata en Carolina del Sur. Con el escrutinio casi completo, durante la jornada electoral votaron a 131.315 personas, lo cual representa una disminución del 75% en comparación con 2020, cuando participaron 539.263. No obstante, la comparación de estas cifras de participación resulta delicada, ya que en 2020 los Estados Unidos estaba inmerso en una pandemia y Biden competía con varios demócratas por el nombramiento del partido, mientras que ahora prácticamente no enfrentaba competencia.
En cualquier caso, la cifra de 131.315 votantes quedó por debajo de las proyecciones del congresista James Clyburn, una influyente figura dentro del Partido Demócrata en Carolina del Sur, quien en una entrevista con The New York Times un día previo a las primarias, expresó su expectativa que entre 150.000 y 200.000 personas participarían en el procés|proceso. En algunos centros de votación, como el Instituto Eau Claire Columbia, la capital del estado, la participación fue constante, con votantes acudiendo de manera gradual y expresando preocupación tanto por Trump como por la economía.
Carolina del Sur, clave en las primarias del 2020
Carolina del Sur fue la primera cita de la contienda demócrata porque el año pasado, por iniciativa de Biden, el partido cambió el calendario de las primarias, arrebatando a Iowa y Nuevo Hampshire los primeros sitios que habían ocupado desde 1972, y concediéndole este honor al estado meridional. Esta modificación tenía dos objetivos: reafirmar la lealtad de Biden al estado que revivió su candidatura en 2020 después de malos resultados en Iowa y Nuevo Hampshire, así como incluir en el proceso de primarias voces más diversas, como las de la comunidad afroamericana, clave en Carolina del Sur, y la hispana, que será la protagonista en las primarias de Nevada el martes.
A pesar de su poder simbólico, Carolina del Sur solo ha asignado a Biden 55 delegados de los 2.000 que necesitará para proclamarse oficialmente como el candidato demócrata de cara a las elecciones de noviembre, donde podría volver a enfrentarse a Trump, favorito para ser el candidato republicano.
Las primarias republicanas, donde Trump competirá contra la exembajadora de los EE.UU. ante la ONU y exgobernadora de Carolina del Sur, Nikki Haley, están programadas para el 24 de febrero. A pesar de la inversión del Partido Demócrata en Carolina del Sur, este estado no está en juego en noviembre, ya que se considera un bastión conservador que no ha votado a un candidato presidencial demócrata desde 1976, con Jimmy Carter (1977-1981).