El primer ministro británico, Boris Johnson, ha decidido confinar Inglaterra ante el enorme aumento de casos de coronavirus en el país. En un mensaje dirigido a todos los ciudadanos británicos, Johnson ha anunciado este lunes por la noche el cierre de las escuelas y el confinamiento domiciliario a partir de esta medianoche. Unas medidas muy similares a las que ya aplicó en el mes de marzo coincidiendo con la primera ola del coronavirus.
"Ahora tenemos una nueva variante del virus y está siendo frustrante y alarmando ver la velocidad con que esta nueva variante se está expandiendo", ha advertido a Boris Johnson. Por séptimo día consecutivo, el número de casos registrados este lunes supera los 50.000 contagios: El Reino Unido ha vuelto a batir el récord de nuevos contagios por Covid-19 con 58.784 nuevos casos en las últimas 24 horas. Y, inevitablemente, este aumento alarmante está causando una importante saturación al sistema sanitario británico.
¿Cómo será el confinamiento en Inglaterra?
Una de las medidas más destacadas de este confinamiento es el cierre de las escuelas, que hasta mediados de febrero devuelven a la educación virtual. Johnson ha advertido que las próximas semanas "serán las más duras", pero calcula que a finales de febrero los cuatro grupos prioritarios ya se habrán vacunado. "Aunque conseguimos eso, tenemos que ser cautelosos", ha puntualizado el primer ministro.
Por otra parte, las nuevas restricciones también incluyen:
- Confinamiento domiciliario excepto por razones esenciales como ir al médico, comprar, hacer ejercicio y trabajar, siempre que el teletrabajo no sea posible. En definitiva, igual que en marzo.
- Aunque las escuelas y universidades cierran, las guarderías se mantienen abiertas.
- Los restaurantes pueden ofrecer comida para llevarse, pero no alcohol.
- Los equipamientos deportivos interiores y exteriores tienen que cerrar.
- Se suspenden las competiciones deportivas amateurs, pero se mantiene la competición profesional como la Premier League.
Inglaterra sigue los pasos de Escocia
El confinamiento en Inglaterra es muy similar a lo que ha anunciado esta tarde la primera ministra escocesa, Nicola Sturgeon. A partir de esta medianoche, los escoceses quedan confinados en su casa hasta finales de enero.
Estas restricciones se aplicarán sólo a Inglaterra, ya que Escocia, Gales e Irlanda del Norte, tienen el poder para dictar sus propias restricciones hacia la pandemia de la Covid-19.