Un juez de EE.UU. ha enviado a la prisión al ultraderechista Steve Bannon, exasesor de Donald Trump. Concretamente, un juez federal ha ordenado este jueves que Bannon ingrese en la prisión el próximo 1 de julio para cumplir su condena para desacatar el Congreso. El ultraderechista fue condenado en octubre del 2022 a cuatro meses de prisión por haberse negado a comparecer ante el comité que investigaba el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021, que tuvo lugar mientras el Congreso certificaba la victoria de Joe Biden en las presidenciales de 2020.

Bannon es uno de los dos exmiembros del círculo íntimo de Trump que afrontaban un proceso judicial para no participar en la investigación parlamentaria. El otro ya entró en la prisión en marzo para cumplir otra pena de cuatro meses. Se trata de Peter Navarro, exasesor del expresidente en la Casa Blanca. Por su parte, Bannon había apelado la sentencia, pero un tribunal federal de apelaciones del Distrito de Columbia confirmó su condena penal el pasado 10 de mayo. Hasta entonces, la sentencia se había quedado en suspense a la espera de resolverse la apelación.

Comparecer por el asalto al Capitolio

El comité quería que Bannon testificara porque creía que tenía algún conocimiento previo de lo que iba a pasar aquel 6 de enero de 2021, cuando miles de seguidores de Trump asaltaron el Capitolio. Aquel día murieron cinco personas y cerca de 140 agentes acabaron heridos. Y es que el ultraderechista habló con Trump al menos dos veces la víspera del ataque, a la vez que el 5 de enero aseguró en su pódcast que al día siguiente se desataría un "infierno". Sin embargo, Bannon se negó a testificar.

En octubre de 2022 fue condenado a cuatro meses de prisión y a una multa de 6.500 dólares, aunque el juez federal Carl Nichols dijo que Bannon no tenía que entrar todavía en la prisión hasta que concluyera cualquier procedimiento de apelación. Así, hace unas semanas que un tribunal de apelaciones de Washington rechazó por unanimidad diversos de los recursos presentados y los fiscales pidieron al juez Nichols que ordenara el ingreso en la prisión del exasesor de Trump, cosa que ha hecho este jueves delante la falta de argumentos para seguir aplazando la sentencia. La Fiscalía acusaba a Bannon de "exacerbar" con su negativa a comparecer el espíritu de agresión al estado de derecho que representó la insurrección del 6 de enero, mientras que el juez Nichols señaló que la sentencia tenía el objetivo de "disuadir a otros de cometer delitos similares".

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