El juez del Tribunal del Sheriff de Edimburgo ha decidido aplazar el juicio de extradición de Clara Ponsatí hasta el próximo 18 de junio, ya que su inmunidad como eurodiputada impide que sea procesada en el Reino Unido. Nigel Ross quiere esperar tres meses por si el Parlamento Europeo le levanta esta inmunidad, tal como ha solicitado el Tribunal Supremo.
Ponsatí se ha presentado a una vista preliminar breve sobre su proceso de extradición en la corte civil de la capital escocesa, que en su última sesión fijó el inicio del juicio para el 11 de mayo.
Su abogado, Aamer Anwar, lo ha calificado de "victoria" contra el abuso de "el Estado de derecho en España". En declaraciones a los medios en la salida del juzgado, el letrado ha apuntado que "en una verdadera democracia, la gente no es procesada por defender el cambio político por medios pacíficos y constitucionales"
Ponsatí, que ha ido a la vista con una maleta y ha comentado con los periodistas que vendía de Bruselas, ha afirmado que España "está actuando de una forma totalmente fuera de los parámetros de la Unión Europea". "España no respeta las decisiones de la Cort Europea de Justicia y está actuando de una manera discriminatoria. ¿Si yo puedo estar en Perpinyà, por qué no puedo ir a Barcelona"?, ha dicho en alusión a su participación, el pasado sábado, en el acto al lado del expresidente catalán Carles Puigdemont en la ciudad francesa.
Ponsatí se ha mostrado cauta al evitar concretar si cree que la justicia escocesa suspenderá definitivamente el proceso. "No podemos adelantar acontecimientos, tenemos que pasar el proceso de inmunidad al Parlamento y ya hablaremos. Es muy evidente que España no está respetando la inmunidad y está actuando de una forma manipuladora", ha comentado.
Ponsatí recogió en Bruselas su acreditación como miembro del Parlamento Europeo el 5 de febrero, pero cinco días después el Tribunal Supremo español solicitó a la cámara comunitaria el suplicatorio para desposeerla de inmunidad y que pueda ser juzgada.
Asimismo, el tribunal español pidió en el Reino Unido que se continúe el trámite de la euroorden por entender que, después del Brexit, su inmunidad no llegaría a aquel país.
Hasta ahora el proceso sigue en marcha en Escocia, a la espera de que el juez, Nigel Ross, decida si acepta los argumentos de la defensa o sigue el criterio de la fiscalía, que actúa en nombre de España, y sostiene que el delito de sedición, que no existe en la legislación escocesa, sería equivalente al de traición.
Ponsatí, a quién las autoridades de Escocia no han retirado el pasaporte, de manera que puede desplazarse a Bruselas, sigue residiendo en la localidad escocesa de St.Andrews, donde volvió en marzo del 2018, después de exiliarse en Bélgica a finales del año anterior.