El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, ha salido de la prisión británica de alta seguridad en la cual hacía cinco años que estaba recluido. Así lo ha confirmado la misma organización a través de sus redes sociales: "Julian Assange está libre. Dejó la prisión de máxima seguridad de Belmarsh la mañana del 24 de junio, después de haber pasado allí 1.901 días," ha publicado WikiLeaks en Twitter (ahora, X), donde han narrado cómo su fundador ya ha abandonado el Reino Unido. Assange, de 52 años y nacionalidad australiana, ha podido salir en libertad después de llegar a un acuerdo con el Departamento de Justicia de los Estados Unidos que pone fin a más de una década de conflicto judicial. A través del acuerdo, Assange evita los 18 delitos que se le querían imputar, a cambio de reconocer uno con una pena más baja.

La justicia norteamericana había acusado Assange de hasta 18 delitos por violar la Ley de Espionaje a causa de una de las filtraciones de información clasificada más grandes de la historia de los Estados Unidos en 2010, que reveló secretos de las guerras del Iraq y Afganistán, así como datos sobre los detenidos en la base de Guantánamo, entre otros asuntos. Según el acuerdo conseguido con el Departamento de Justicia, Assange se declarará culpable el miércoles, durante una audiencia judicial, de un solo cargo por conspirar para obtener y difundir ilegalmente información clasificada. De esta manera, el fundador de WikiLeaks solo sería sentenciado a 62 meses de prisión, que ya ha cumplido en la prisión de alta seguridad de Belmarsh.

El acuerdo con los EE.UU. le permite viajar a su Australia natal, aunque requiere que comparezca ante las autoridades estadounidenses el próximo miércoles. La comparecencia tendrá lugar en un tribunal de las Islas Marianas a causa de la oposición de Assange a viajar al territorio continental de los Estados Unidos y a la proximidad del tribunal con Australia, según una carta del Departamento de Justicia presentada ante el juzgado.

Celebraciones por la liberación de Assange

"Después de más de cinco años en una celda de 2x3 metros, aislado 23 horas al día, pronto se reunirá con su mujer Stella Assange y sus hijos, que solo han conocido a su padre detrás de las rejas," destaca WikiLeaks en las redes, donde celebran la liberación de su fundador: "La libertad de Julian es nuestra libertad".

Por otra parte, la esposa y los padres del fundador de WikiLeaks han agradecido las gestiones del Ejecutivo de Camberra, así como de sus simpatizantes y activistas que lucharon a favor de su puesta en libertad y su retorno al país natal. "Las palabras no pueden expresar nuestra inmensa gratitud hacia vosotros. Sí, vosotros los que os habéis movilizado durante años y años para hacer esto realidad. ¡Gracias!", ha tuiteado Stella Assange.