El primer ministro del Canadá, Justin Trudeau, dimitirá como líder del gobierno y del partido después de nueve año en el poder. Ha anunciado que lo hará después de que el Partido Liberal escoja al próximo líder, con la previsión que este se pueda presentar a las próximas elecciones, a finales de octubre. "Soy un luchador, no soy una persona que se aleje de una batalla, pero siempre me ha movido mi amor por el Canadá y mi deseo por servir a los canadienses. El país merece tener una opción real en las próximas elecciones, y he visto claro que si tengo que librar batallas internas, no puedo ser la mejor opción", ha afirmado Trudeau este lunes en una rueda de prensa.

Ha reconocido que el Parlamento está "paralizado" desde hace meses, con el gobierno en minoría más longevo en la historia del país. En este sentido, ha informado de que el Parlamento permanecerá cerrado hasta el 24 de marzo, lo que evitará que los partidos de la oposición puedan presentar de manera inmediata la anunciada moción de censura contra el Gobierno. Ha reconocido que cuando se reanuden las sesiones, acabarán presentando la moción, pero entonces, el liderazgo en el Partido Liberal probablemente ya estará decidido.

Trudeau, que accedió al cargo en noviembre del 2015 y ha sido reelegido primer ministro tres veces, ha ido perdiendo popularidad con el paso del tiempo. Ha sido acusado de no haber sabido gestionar correctamente la economía del país, que se vio afectada por una elevada inflación después de la pandemia, y que se ve amenazada con la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca, que ha expresado la intención de imponer aranceles en los productos canadienses ya menospreciado a Canadá como país, llamándolo el "estado 51". 

El momento más crítico para Trudeau llegó a mediados del diciembre pasado, cuando la viceprimera ministra y titular de la cartera de Finanzas, Chrystia Freeland, anunció la dimisión por las "discrepancias" con el primer ministro a la hora de gestionar el "nacionalismo económico" de Trump. Probablemente, aquel fue el punto de inflexión que ha llevado Trudeau a tomar la decisión anunciada este lunes, aunque no lo ha reconocido así. Preguntado por este episodio, se ha limitado a expresar que le hubiera gustado que Freeland continuara en el gobierno, pero que no revelará conversaciones privadas.

Con todo, Trudeau ha reivindicado la tarea hecha a lo largo de estos años. "Desde el 2015 he luchado por este país, para fortalecer la clase media mientras nos dábamos apoyo durante la pandemia, por la reconciliación, por defender el comercio libre en este continente, para mantenernos fuertes al lado de Ucrania y de la democracia, para luchar contra el cambio climático y para poner la economía a punto para el futuro", ha destacado.