El Partido Laborista ha arrasado a las elecciones del Reino Unido y su líder, sir Keir Starmer, está ya en las puertas del número 10 de Downing Street. Con más de 400 escaños en la Cámara de los Comunes —la mayoría absoluta son 326—, pondrá fin así a 14 años de gobiernos conservadores de los 'tories' en una de las épocas más turbulentas de la historia reciente del país, que ha tenido que ejecutar el mandato del pueblo británico en 2016 de salir de la Unión Europea y sufrir las consecuencias del Brexit desde el 2020. El laborismo, pues, va camino también de conseguir su mejor resultado, que obtuvo Tony Blair en 1997 con 418 escaños. ¿Sin embargo, quién es el artífice de esta victoria y el próximo primer ministro del Reino Unido?
Nacido en Southwark, en el sur de Londres, en 1962 y en el seno de una familia de clase trabajadora —hijo de una enfermera y un operario de fábrica de herramientas—, Keir Starmer entró por primera vez como parlamentario en la Cámara de los Comunes en el 2015, de la mano del Partido Laborista. Antes de eso, había ejercido su profesión, como abogado especializado en derechos humanos y después fiscal. Formado en la Universidad de Leeds y con posgrado en Oxford, Starmer ha sido responsable del Crown Prosecution Service (2008-2013), la fiscalía británica. También ha sido consejero legal de la reina Isabel II desde el 2002 y en 2014 fue nombrado sir.
"Change" hacia la alternativa pragmática y centrista
Solo cinco años después de entrar en la Cámara de los Comunes, Starmer cogió en el 2020 las riendas del Partido Laborista. Lo hizo en un momento en el cual la formación de referencia del centroizquierda en el Reino Unidos estaba en horas bajas: el popular entre la izquierda Jeremy Corbyn, que lideraba el laborismo desde el 2015, había sufrido un gran batacazo electoral en 2019 ante el derechista y euroescéptico Boris Johnson, una de las figuras clave del Brexit. Un líder, Corbyn, con el cual Starmer ha expresado discrepancias reiteradamente y, de hecho, le llegó a expulsar del partido en el 2020 con acusaciones de antisemitismo; si bien el primero lo habías situado rápidamente en órganos de poder del partido al haber dado el salto a la política, como responsable de todo el relativo al Brexit y la política exterior. Starmer, que tuvo el apoyo del ex primer ministro Gordon Brown y del alcalde de Londres, Sadiq Khan, ganó la disputa interna y se convirtió en líder de la oposición durante la pandemia.
Desde entonces, Starmer ha virado el laborismo hacia la derecha, una maniobra que ha dado resultado ante el conservador electorado británico y que se ha presentado como una alternativa centrista y de Estado ante el cansancio generalizado del pueblo británico con los 'tories' después de 14 años. Ante los sucesivos escándalos y polémicas de los gobiernos de Boris Johnson, Liz Truss y Rishi Sunak, en un contexto en que la economía británica también está en horas bajas, Starmer se ha presentado como alternativa pragmática y ha azuzado el discurso del "change" (cambio). Casi en las antípodas de Jeremy Corbyn, Starmer es monárquico y mantiene postulados proisraelíes, si bien de joven mostró simpatías por las ramas más a la izquierda del laborismo.
Casado, dos hijos, no come carne y fan del Arsenal
A Starmer se le ha descrito como una persona alejada de estridencias, un funcionario modélico y trabajador que ha dado el salto a la política y que no presenta el carisma y la oratoria de aquellos líderes políticos que han dedicado toda la vida a moverse en los partidos y delante de las cámaras. De su vida personal se sabe que está casado con Victoria Alexander, abogada y trabajadora al servicio de salud público británico, de familia judía, que conoció en torno a la década de los 2000. Tienen dos hijos, un chico y una chica. Si bien Starmer afirma ser ateo, la familia mantiene vínculos con la fe judía. También son vegetarianos. Aficionado al fútbol, deporte que practicó en un equipo pequeño, Starmer es fan del Arsenal.