Los líderes y jefes de Estado de la Unión Europea han señalado que la reciente rebelión interna en Rusia encabezada por el grupo Wagner ha "debilitado" la figura del presidente ruso, Vladímir Putin. "Demuestra que hay graves grietas", ha señalado la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, momentos antes del inicio de la reunión del Consejo Europeo de este jueves y viernes en Bruselas. No obstante, la dirigente del ejecutivo europeo ha asegurado que los acontecimientos tendrán "consecuencias" y el alto representante para la política exterior de la Unión Europea, Josep Borrell, alerta de que "un Putin debilitado supone un peligro mayor".
Para Borrell, el conflicto interno en Rusia ha puesto de manifiesto que el máximo dirigente del Kremlin "no es la única autoridad" en el país y que "ha perdido el monopolio de la fuerza". En este sentido, ha subrayado que un Moscú inestable supone "un riesgo" y que hay que estar atentos a sus próximos movimientos. En la misma línea se ha expresado el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, quien ve "grietas" en el sistema ruso. Por su parte, el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, ha mostrado su preocupación por una posible escalada del conflicto y ha reiterado la importancia de que la UE mantenga su unidad. "Lo que hemos visto este fin de semana en Rusia es un contraste a la unidad que demuestra la UE y la OTAN", ha señalado.
Todavía en relación con los problemas causados por el grupo Wagner, el canciller alemán, Olaf Scholz, ha tildado a Rusia "de irresponsable" por confiar una parte de su fuerza militar a entidades privadas. "Es una amenaza para Rusia y para los países donde el grupo Wagner está distribuido", ha puntualizado, calificando sus acciones "de irresponsables e imborrables".
Apoyo a Ucrania
Otro consenso en la cumbre europea —ya habitual durante las últimas reuniones— es el mensaje de apoyo a Ucrania. Durante el turno de entradas, los países bálticos y escandinavos han puesto especial énfasis en la importancia de que Ucrania entre en la OTAN, una cuestión que se tratará en la cumbre de la alianza en Vilna de los días 11 y 12 de julio. "Una vez acabe la guerra, Ucrania tiene que formar parte de la OTAN; es la única manera de garantizar la paz", ha apuntado el primer ministro de Lituania, Krisjanis Karins. Por su parte, Borrell ha hecho un llamamiento a los diferentes estados miembros para que sigan dando apoyo en el Fondo Europeo de Apoyo a la Paz, el instrumento comunitario para reforzar la capacidad de la Unión para prevenir conflictos. "El apoyo a Ucrania se tiene que mantener", ha reivindicado.
Putin trata de recuperar el liderazgo
Después de la rebelión de Wagner, parada en el último momento, antes de que el grupo paramilitar llegara a Moscú, Putin ha intentado volver a mostrar bastante como líder con comparecencias y un discurso en la televisión pública, en las cuales ha afirmado que las fuerzas armadas rusas han parado lo que podría haber sido "una guerra civil". También ha dejado al cargo al ministro de Defensa, Sergei Shoigu, a quien el líder de Wagner, Prighozin, exigía destituir, y ha detenido al general Sergei Surovikin, a quien Prighozin había alabado, acusándolo de colaborar con Wagner por no comunicar los planes del grupo de mercenarios aunque supuestamente los conocía.