"La victoria no es más que el fruto de un cálculo exacto"

Hace más de dos mil años, el general taoísta chino Sunzi (Sun Tzu en la transcripción antigua) escribió lo que se cree que es el primer tratado sobre la guerra. A lo largo de la historia y hasta el día de hoy, los 13 artículos del Arte de la guerra siguen siendo la base sobre la cual dirigentes militares y líderes de todo tipo diseñan sus tácticas. Puestos en práctica, las lecciones sirven para resolver cualquier conflicto humano. Según el maestro Sun, la mejor estrategia de guerra es evitar por todos los medios la confrontación directa con el enemigo. La clave de la victoria para un general es, por lo tanto, dirigirse a la batalla solamente con la absoluta certeza de que triunfará. En Ucrania, la invasión rusa se alarga más de lo que Vladímir Putin pensaba. Como en todas las guerras, no es nada fácil obtener información fiable de la zona del conflicto y, teniendo en cuenta el control que el Kremlin ejerce sobre los medios, es imposible saber a ciencia cierta cuáles son los verdaderos objetivos de Moscú en Ucrania. Pero si hacemos caso de lo que nos dice Sunzi y lo aplicamos a los últimos acontecimientos militares, vemos que el ejército ruso habría cometido varios errores estratégicos.

El maestro Sun

"Solo te pueden vencer tus propios errores"

La teoría más generalizada sobre la invasión es que Putin tenía planeado entrar a Kyiv en tres días, en una operación relámpago para desestabilizar el gobierno ucraniano. Pero tras más de dos semanas, las fuerzas rusas todavía no han conseguido poner un pie en la capital. Según la inteligencia británica y la norteamericana, un convoy de más de sesenta kilómetros sigue parado en los caminos fangosos del norte de Kyiv, donde, escasos de provisiones y de moral, son presas fáciles de los ataques de Ucrania. Si seguimos la regla de oro de Sunzi, sabremos que este problema se debe, como todos los imprevistos en una guerra, a un error de cálculo. Si los comandantes militares rusos no supieron anticipar con precisión cuando podría durar la campaña y, a partir de aquí, calcular todo el resto, la lógica del Arte de la guerra pone seriamente en duda que los rusos puedan salir victoriosos. De la misma manera, un error en el cálculo denota una falta de cohesión en todos los aspectos que conciernen una campaña militar. Como un violín desafinado en medio de una gran orquesta.

"El capricho del príncipe"

Para saber el origen del error de cálculo, hay que revisar la cadena de mando del ejército. Según el testimonio de un informador que dice ser funcionario del servicio secreto ruso, el miedo y la corrupción en la defensa rusa ha llegado a tales niveles, que "nadie en ningún sitio tiene información fiable sobre cuestiones complejas. Los informes que me pasan son corregidos por el liderazgo para ser políticamente correctos, más positivos, menos negativos". De esta manera, la verdad de la guerra se manipula en todos los niveles por funcionarios corruptos con el fin de hacerla favorable de cara a Putin. Este es un error garrafal en los ojos de Sunzi, o, como lo diría él, el primero de los 'siete males' en el gobierno de los ejércitos: "Imponer órdenes tomadas en la Corte según los caprichos del príncipe", como ir a la guerra cuando no es favorable para el Estado o no se cuenta con los medios necesarios.

A su vez, este hecho augura que la moral de los soldados acabará por colapsar del todo muy pronto. La falta de confianza en tu equipo, por muy severo que sea el control de los medios y de la propaganda, acaba por hacer imposible la victoria. Ni siquiera tres semanas después del inicio de la invasión, Moscú ya ha tenido que admitir que ha enviado jóvenes reclutas a Ucrania sin comunicárselo ni a ellos ni a sus familias. Según la versión del Kremlin, Putin ni siquiera lo sabía. Para Sunzi, es sencillamente imposible hacer buenos cálculos sin tener fuentes fiables de información y saber en todo momento qué pasa en el frente. ¿Puede ser que la corrupción en todos los niveles acabe por descentralizar el control de la sociedad rusa y que el poder, una vez dinamitado, se relegue a los líderes locales? Por el contrario, la propaganda ucraniana se extiende por las redes sociales y se aprovecha de la moral baja de los rusos. Decenas de vídeos de soldados jóvenes capturados por las fuerzas ucranianas, comiendo, llorando y llamando a sus madres, sí que reflejan las lecciones del maestro Sun: "Trata bien a los prisioneros [...] procura, si es posible, que se sientan mejor contigo que en su propio campamento o a su propia patria".

"El arte de la guerra es el arte del engaño"

Según los expertos y aficionados del armamento militar, Rusia no se ha adentrado en Ucrania con el material necesario para aguantar una guerra larga. Lo que sería más necesario, teniendo en cuenta el terreno y la época del año, es movilizar el equipamiento para construir y reparar los caminos castigados por la raspútitsa, pero parece que tampoco lo habían anticipado. Tal como ya dijo el maestro Sun, "solo hace falta un error para perderlo todo [...] Si [el general] recluta tropas en un momento inoportuno, si las hace salir cuando no tendrían que salir, si no se tiene un conocimiento exacto de los lugares donde las tiene que conducir, si les hace realizar campamentos desventajosos, si los fatiga sin objetivo, si les hace volver sin necesidad", lo único seguro es la derrota.

"Nunca ninguna guerra larga benefició a ningún país: 100 victorias en 100 batallas es simplemente algo ridículo", advierte Sunzi. Ciertamente, es difícil de imaginar cómo Putin podría alargar la guerra hasta la primavera de manera viable. Por una parte, Rusia tendría que replantear toda su estrategia para asegurarse, esta vez sí, que las vías de suministro son adecuadas (pero recordemos al maestro Sun: "Los que poseen los verdaderos principios del arte militar no lo intentan dos veces"). Por otra parte, la llegada de la primavera complicaría todavía más el terreno, hecho que los ucranianos ya han anticipado y han sabido utilizar para su defensa, inundado los campos al norte de la capital con las aguas del río Irpin.

Por último, alerta Sunzi, "no se pueden mantener las tropas mucho tiempo en campo abiertas sin causar un gran perjuicio al Estado". Ciertamente, Rusia podría estar en las puertas de una profunda crisis económica que, junto con el malestar generalizado en las calles de Moscú, podría poner en peligro el futuro del régimen de Putin. Alargar una guerra nunca es recomendable, dice Sunzi, sino que denota una clara falta de organización. Tarde o temprano "las arcas del príncipe al cual sirves se agotarán, tus armas oxidadas no te servirán para nada, la vigorosidad de tus soldados disminuirá, su valor y sus fuerzas desaparecerán, las provisiones se consumirán y quizás tú mismo te verás reducido en los extremos más fastidiosos".

"Hacer nacer la fuerza en el seno mismo de la debilidad"

Los ucranianos, ávidos discípulos del maestro Sun, parece que han sabido sacar provecho del error de los rusos en el norte de Kyiv. En vez de atacar al convoy kilométrico con una emboscada o un bombardeo, las fuerzas ucranianas han preferido ahorrarse el material bélico y asegurarse de destruir todos los vehículos que transportan suministro al convoy. Desde una posición donde el enemigo es más fuerte, predica Sunzi, "evita tanto como puedas llegar a las manos con él; la prudencia y la firmeza de un pequeño número de personas pueden conseguir cansar y dominar incluso a un ejército numeroso". Si son pacientes, los ucranianos podrán ver cómo el convoy ruso se queda sin suministro y cómo los soldados vuelven a pie, totalmente hundidos, sin malgastar ni una bala. "Un general hábil nunca se ve reducido a tales extremos; sin librar batallas, conoce el arte de humillar a sus enemigos; sin invertir una gota de sangre, sin ni siquiera sacar la espada, consigue tomar las ciudades", escribe Sunzi.