El rey emérito de España, Juan Carlos I, "está contando los días" para volver de Abu Dhabi. Así lo ha relatado su biógrafa, Laurence Debray, en una entrevista que recoge Der Spiegel, donde ha asegurado que el borbón quiere volver a su país de origen "cuanto antes mejor". Debray ha relatado que se encontró con él hace un mes aproximadamente y que Juan Carlos I está meditando de cuál forma puede volver a España después de todo el alboroto y la polémica que ha rodeado su figura. El posible retorno del monarca español es chocante, ya que hace solamente unas semanas, en una carta pública de la Casa Real, anunció que quería seguir viviendo en Abu Dhabi por motivos "que son privados", pero que quería visitar su tierra "frecuentemente" para ver a su familia.
El emérito, que ya tiene ochenta y cuatro años, ha sido objeto de numerosos escándalos, que se intensificaron desde su abdicación en el 2014. Entre otros casos, se trataba de "regalos" cuestionables de millones de euros procedentes de Arabia Saudí y denuncias de blanqueo de capital. El entonces rey Abdullah de Arabia Saudí depositó una suma de unos 100 millones de dólares en una cuenta bancaria suiza que Juan Carlos tenía acceso. A raíz de esto se le iniciaron procesos contra su persona, que después la justicia española cerró- una decisión que ha levantado mucha polvareda porque se basaba en la inviolabilidad del rey. En agosto del 2020 se exilió en los Emiratos Árabes Unidos, ya que a principios de marzo del mismo año se le empezó a investigar.
Durante marzo de este año el rey emérito anunció que no tenía pensado volver, sino acomodarse a Arabia Saudí, pero sin descartar retornos puntuales para visitar la familia real. Con respecto a esto, el actual monarca español aseguró: "Sus Majestades el Rey respeta y entiende la voluntad de su Majestad el Rey Don Juan Carlos".
Entre muchos de los procesos contra el rey emérito, algunos son abiertos por la justicia británica. Es decir, la justicia británica no aplica los mismos criterios que la justicia española: el rey emérito Juan Carlos I puede ser juzgado y no disfruta de inmunidad. Así lo dictaminó, pocas semanas después de que justamente la fiscalía del Tribunal Supremo decidiera archivar todas las investigaciones contra el exmonarca. En este contexto, desde el Gobierno evitan cualquier tipo de valoración. La ministra de Justicia, Pilar Llop, se limitó a expresar "respeto" por los fallos judiciales, sea al Reino Unido o a España. Otra cosa son las explicaciones que, según Pedro Sánchez, el exjefe del Estado tendría que dar ante la ciudadanía.
En una atención a los medios antes de un acto en Gijón, Pilar Llop dejó claro que "el Gobierno no valora decisiones que adopta un sistema judicial extranjero, en este caso el británico". Dejada clara esta previa, la ministra de Justicia señaló que "respetan las decisiones que se toman en el ámbito de sus propios procedimientos judiciales y procesales". Y lo comparó con la situación en el Estado español: "Lo que sí que puedo decir es que los asuntos que el rey emérito tenía abiertos a España han sido archivados por la Fiscalía, y lógicamente también respetamos las decisiones de la Fiscalía".