El presidente de la República Francesa, Emmanuel Macron, ha acusado al Nuevo Frente Nacional (NFP) y a Reagrupamiento Nacional (RN) de haber formado un "frente antirrepublicano" que ha destituido a Michel Barnier como primer ministro. "El proyecto que une a la extrema derecha y a la extrema izquierda no es para construir, sino para causar desorden", ha denunciado en una declaración institucional este jueves. Macron ha asumido su parte de responsabilidad por la situación de inestabilidad política que atraviesa Francia, pero ha descartado la dimisión. "El mandato que me han otorgado democráticamente es de 5 años, que ejerceré hasta su término", ha subrayado. El presidente francés ha recordado que la Constitución no permite celebrar nuevas elecciones legislativas hasta 10 meses después de la celebración de estas y ha anunciado que nombrará a un nuevo primer ministro para que forme un gobierno "de interés general" a fin de que las diferentes fuerzas de la Asamblea Nacional no lo puedan derrocar. Ha reiterado que los resultados de las pasadas elecciones dejaron un Parlamento dividido en el cual ninguna formación tiene la mayoría, y en este sentido, ha advertido que ninguna coalición puede pretender tener el poder. "Hace falta una nueva organización política."
Macron: "No asumiré las irresponsabilidades de otros"
Macron ha reconocido que la decisión de convocar elecciones legislativas anticipadas le ha sido recriminada en múltiples ocasiones, y ha asumido su "responsabilidad" por la situación que esta decisión haya podido provocar, pero ha justificado que era necesario tras los resultados de las elecciones al Parlament Europeo, en el que la extrema derecha fue la fuerza más votada, y más teniendo en cuenta que de todos modos era previsible que se produjera una moción de censura contra el entonces primer ministro, Gabriel Attal, en otoño.
"Siempre he asumido mis responsabilidades, pero lo que no voy a hacer es asumir la irresponsabilidad de otros, y especialmente de los parlamentarios que han decidido dejar caer el gobierno pocos días antes de Navidad", ha aseverado. Macron ha acusado la formación de Marine Le Pen y el Nuevo Frente Popular de "cinismo", y dirigiéndose a la ciudadanía, ha advertido: "No piensan en sus vidas, sus problemas, solo piensan en una cosa, en las elecciones presidenciales, y en cómo prepararla y precipitarla". En contraposición, ha asegurado que él no se mueve por la ambición, sino por "la nación", ya que no puede presentarse a la reelección en 2027.
Macron ha anunciado que nombrará a un nuevo primer ministro en los próximos días, aunque no ha avanzado ningún posible nombre, y también ha anunciado que a mediados de diciembre se presentará una ley especial de presupuestos, que también cayeron con la moción de censura, para poder dar "continuidad a los servicios públicos y la vida del país". Por último, ha hecho un llamamiento a "reconstruir el país". "Donde haya cólera e insultos, hay que restablecer la cordura; allí donde haya división, querer la unidad. En conclusión, donde algunos ceden a la angustia, buscar la esperanza".
Macron agradece el trabajo a Barnier: "Gracias por la dedicación"
Las primeras palabras de Macron han sido de agradecimiento hacia el primer ministro en funciones. "Quiero agradecer a Michel Barnier por el trabajo hecho, la dedicación y la pugnacidad. Él y sus ministros se han mostrado a la altura del momento cuando otros no lo han hecho", ha remachado. Macron ha recordado que después de las elecciones legislativas se reunió con los representantes de las distintas formaciones para convencerlas de colaborar ante una situación de bloqueo. El presidente ha defendido la elección de Barnier, quien asegura que era un hombre "con experiencia, que podría haber unido la mayoría más amplia de todos los grupos, de la izquierda a la derecha". Sin embargo, el nombramiento de Barnier fue polémico desde el inicio, especialmente entre los miembros del Nuevo Frente Popular, quienes consideraron la propuesta un desprecio de Macron en su espacio político, que fue la primera fuerza en las elecciones.