Alta tensión política y social en Venezuela. A una semana de la toma de posesión del próximo presidente del país, todas las espadas están en alto y hay una incertidumbre sobre lo que puede pasar el próximo 10 de enero. Según la Constitución venezolana, el vencedor de las elecciones presidenciales tiene que ir este día a la sede de la Asamblea Nacional (AN, Parlamento), hoy controlada por el chavismo, a jurar como jefe de Estado. Nicolás Maduro irá a hacer este acto protocolario del juramento como mandatario reelegido por un tercer mandato, pero lo mismo piensa hacer Edmundo González Urrutia, quien insiste en que cumplirá su promesa de volver al país para "tomar posesión" como legítimo ganador de las elecciones del pasado 28 de julio. El mismo día que el líder opositor viaja a Argentina desde su exilio en Madrid, Maduro ha puesto precio en su cabeza y ha ofrecido una recompensa de 100.000 dólares por información que conduzca a la captura de González Urrutia. La comunidad internacional sigue muy de cerca este conflicto, al que a partir del próximo 20 de enero se sumará otra incógnita en la ecuación, cuando Donald Trump tome posesión como presidente de los Estados Unidos, con la duda de sí reconocerá o no al líder opositor como legítimo ganador de los comicios, cosa que sí que hizo el gobierno Biden el pasado noviembre.

"Se busca"

"Se busca. Orden de captura. Recompensa: 100.000$", anuncia un cartel publicado a redes sociales por la policía científica con la foto de González Urrutia. Un cartel emitido por la fiscalía venezolana que también muestra los delitos por los cuales acusan al opositor: conspiración, complicidad en el uso de actos violentos contra la república, usurpación de funciones, forjamiento (falsificación) de documentos, entre otros. El cartel se ha repartido por todo el país y está bien visible en aeropuertos y puestos de control policial de toda Venezuela. Aunque González Urrutia ha prometido y sigue afirmando que el día 10 estará en Caracas para tomar posesión y ser investido presidente, los riesgos para su seguridad son evidentes, y el cartel de la caza y captura dificulta todavía más sus opciones de poder llegar a la Asamblea Nacional para cumplir su promesa. La confrontación política y social parece inevitable, con el bando oficialista y la oposición, y sus respectivos partidarios, reclamando la legitimidad del cargo. Tanto Maduro como González Urrutia y su compañera de partido María Corina Machado han convocado a sus seguidores a manifestarse el 10 de enero.

Argentina, primera parada

La Plataforma Unitaria Democrática (PUD) que agrupa a la oposición mayoritaria de Venezuela anunció este jueves que González Urrutia viaja a Argentina y que este viaje forma parte de una agenda internacional con que consolidará su compromiso con el país caribeño de cara a "su toma de posesión" el 10 de enero, según informa Efe. "El presidente electo de Venezuela, Edmundo González Urrutia, llegará a Argentina como aparte de su agenda internacional, consolidando el compromiso con los venezolanos dentro y fuera del país de cara a su toma de posesión", escribió a X el equipo del opositor. El Comando ConVzla -equipo que organizó la campaña presidencial del candidato de la PUD- señaló que, como aparte del "camino a la libertad", habrá una "gira internacional previa al 10 de enero" de González Urrutia, que, por su parte, dijo a X que Argentina será la "primera parada" en América Latina. Fuentes oficiales del país austral confirmaron a Efe que presidente argentino, Javier Milei, recibirá el sábado en Buenos Aires González Urrutia en la Casa Rosada, sede del Ejecutivo. El Gobierno de Milei fue uno de los primeros a considerar a González Urrutia como vencedor de los comicios del 28 de julio, cosa que aumentó las tensiones con el Ejecutivo de Maduro, que expulsó a los diplomáticos argentinos.

El apoyo internacional a González Urrutia

Después de las elecciones del 28 de julio, el Consejo Nacional Electoral (CNE) proclamó ganador Nicolás Maduro con el 51,20% de los votos, enfrente del 44,2% de Edmundo González Urrutia. Pero la oposición no reconoció nunca estos resultados y publicó en una página web lo que afirman son las actas correspondientes al 83% de los votos, mostrando una victoria de González Urrutia con el 67% (7.303.480 votos) delante del 30% de Maduro (3.316.142 votos). El gobierno de Maduro se ha negado insistentemente a publicar las actas electorales, a pesar de la insistencia del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela y a pesar de la presión de la comunidad internacional, que fue reconociendo progresivamente a González Urrutia, como presidente. El gobierno de Joe Biden en los Estados Unidos lo hizo como "presidente electo" el 19 de noviembre de 2024, casi cuatro meses después de las elecciones. La Unión Europea, el Parlamento Europeo, y más 30 países, entre ellos España, Italia, Reino Unido y países latinoamericanos como Argentina, Uruguay, Costa Rica, Ecuador, Panamá, República Dominicana también han reconocido al líder opositor como legítimo presidente.

Después de las elecciones de julio repuntaron las detenciones arbitrarias y las desapariciones forzosas. Más de 1.900 personas fueron detenidas por motivos políticos, entre ellos 42 adolescentes y 245 mujeres. El gobierno venezolano emitió una orden de arresto contra González Urrutia, acusándolo de varios delitos, incluyendo usurpación de funciones y conspiración. El líder opositor tuvo que abandonar Venezuela y se exilió en España, pero ahora está dispuesto a asumir el riesgo de volver para tomar posesión de su cargo, fortalecido por el apoyo de la comunidad internacional...a la espera de lo que decida Trump.