El primer ministro en funciones de los Países Bajos, Mark Rutte, será el próximo secretario general de la OTAN, tal como han acordado este miércoles los embajadores de los 32 países de la Alianza Atlántica. El Consejo del Atlántico Norte, el principal órgano de toma de decisiones de la OTAN, ha decidido nombrar Rutte como el próximo secretario general de la organización para suceder Jens Stoltenberg, que hace diez años que está en el cargo, informó la Alianza en un comunicado.
Rutte asumirá sus funciones como secretario general a partir del próximo 1 de octubre, cuando expire el mandato del político noruego. "Acojo con gran satisfacción la elección de Mark Rutte como mi sucesor por parte de los aliados de la OTAN", ha indicado Stoltenberg a través de un mensaje en la red social X. Stoltenberg ha calificado Rutte como uno "auténtico transatlantista, un líder fuerte y un creador de consenso".
"Le deseo mucho éxito mientras seguimos fortaleciendo a la OTAN. Sé que dejo a la OTAN en buenas manos", ha destacado. La semana pasada, el presidente rumano, Klaus Iohannis, retiró la candidatura a dirigir a la OTAN y dejó Rutte, que ya tenía el apoyo del resto de aliados, como único aspirante.
En todo caso, hacía falta que el Consejo del Atlántico Norte formalizara la decisión de nombrar Rutte, cosa que ha hecho a la reunión que convocaron a los embajadores aliados. Acto seguido, se espera que la decisión sea ratificada por los líderes de la Alianza a la cumbre que celebrarán del 9 al 11 de julio en Washington.
¿Qué dificultades le esperan en Rutte?
Rutte asumirá el liderazgo de la OTAN en un momento crítico. El nuevo cargo empezará el 2 de octubre, poco más de un mes antes de las elecciones norteamericanas, que determinarán el destino de la alianza militar que ha servido como disuasión de Europa del Este contra una Rusia agresiva. El expresidente norteamericano Donald Trump, actual candidato republicano, prometió permanecer a la OTAN, pero amenazó con recortar la ayuda norteamericana a Ucrania si era reelegido.
Sin embargo, los observadores atribuyen a Rutte el mérito de poder hacer tratos con políticos de diferentes orígenes, ganándose incluso los elogios del entonces presidente de los Estados Unidos: "Me gusta este tipo!". La confirmación de Rutte también significa que la cuestión de la sucesión quedará aclarada antes de julio, cuando los líderes de la OTAN se dirijan a Washington para conmemorar el 75.º aniversario de la alianza.
Un camino largo para conseguir la posición
El camino de Rutte para llegar al cargo más alto de la OTAN ha sido un viaje largo. En este sentido, ha estado haciendo campaña desde el noviembre pasado. Rutte ha sido criticado para no ser lo bastante activo en la búsqueda de apoyo de los países de Europa del Este. A pesar de desear el cargo, Rutte no consiguió llevar el gasto de defensa holandés hasta el objetivo de la OTAN del 2% del PIB durante los 14 años que fue ministro. Se espera que Países Bajos cumpla finalmente este objetivo este año.