El ejército de Marruecos ha iniciado este viernes una operación militar contra una zona controlada por el Frente Polisario en el Sahara Occidental. En concreto, militares marroquíes se han desplegado en el paso de Gerguerat, al límite entre el Sahara Occidental y Mauritania, en clara violación del alto el fuego pactado por Marruecos y el Frente Polisario en 1991.
El ministerio de Exteriores marroquí ha confirmado la operación con el objetivo de "restablecer la circulación" con Mauritania por este paso fronterizo y romper el bloqueo al tráfico impuesto hace tres semanas por un grupo de manifestantes saharauis del Frente Polisario. Un pasillo formado por soldados de las Fuerzas Armadas Reales (FAR) permitirá el paso de los camiones y todo tipo de vehículos en los cinco kilómetros de franja que separan la aduana marroquí de la frontera con Mauritania.
Según fuentes gubernamentales marroquíes citadas por Efe, no se va a desalojar a los manifestantes porque "los civiles no son el objetivo" y porque se trata de "una operación pacífica".
Barrera entre la carretera y civiles
Los militares tienen previsto establecer algún tipo de barrera entre la carretera y los civiles saharauis que traten de acercarse hasta ella, manteniendo a estos civiles a tal distancia que no puedan interferir en el tráfico rodado como han estado haciendo.
Hasta el momento, ni el Frente Polisario ni las Naciones Unidas (que tienen desplegada una misión de paz en el territorio, la Minurso) se han pronunciado sobre el anuncio marroquí.
El ministerio de Exteriores marroquí acaba de publicar un comunicado en el que señala que Marruecos "ha dado todo el tiempo necesario" al secretario general de la ONU y a la Minurso para solucionar el bloqueo, pero sus esfuerzos "han resultado vanos y Marruecos ha decidido actuar (...) en plena conformidad con la legalidad internacional".
La zona desmilitarizada donde se encuentra Guerguerat está regida por un llamado "Acuerdo Militar número 1", anexo al acuerdo de alto el fuego vigente desde 1991 y firmado por Marruecos y el Polisario, que prohíbe la entrada de personal militar, entre otras cosas.
Sin embargo, tanto Marruecos como el Polisario se acusan constantemente de romper este acuerdo con actuaciones que suponen una violación del alto el fuego.