La extrema derecha siempre ha tenido a la comunidad LGTBI en el punto de mira y las manifestaciones con motivo del Día Internacional del Orgullo del colectivo son objetivos de sus militantes. El mismo día que en Idaho se frustraba el intento de asalto de 31 supremacistas blancos a una marcha del Orgullo Coeur d'Alene, en Burdeos otros miembros de la extrema derecha y nacionalistas, como se les ha descrito por los presentes, interrumpían la manifestación por la Liberación LGTBI en Burdeos.
12.6.2022 🇫🇷 Nationalists in Bordeaux disrupted the local pride event on a nearby rooftop with anti-lgbt banners and flares. pic.twitter.com/t7gPBdNm2D
— Protest News (@ProtestNews_EN) June 14, 2022
Un número mucho más reducido de partidarios de extrema derecha que sus compañeros ideológicos en la otra lado del Atlántico se reunieron en la localidad francesa de Burdeos con propósitos similares. Enmascarados y ataviados de negro, poco menos de una decena de personas subieron al techo de un edificio en el recorrido de la manifestación desplegaron una pancarta: "Proteged a los niños. Parad la locura LGBT", era el lema que ondulaban desde el edificio en dirección a la marga. Exhibir una supuesta preocupación por los niños como excusa para atizar el odio contra el colectivo es un recurso clásico de los discursos LGTBI-fóbicos.
Los manifestantes han increpado en el grupo que ha intentado interrumpir la manifestación y que tiraba consignas LGTBI-fóbicas. Algunos manifestantes han declarado al medio francés Têtu haber recibido golpes de objeto que estos miembros de ultraderecha tiraron. Finalmente, la policía los detuvo y el pasado domingo pasaron a disposición policial.
El ataque frustrado a Idaho
El mismo 12 de junio, en una localidad en el noroeste de Idaho se organizaba una marcha con motivo del Día de la Liberación LGTBI, la cual es el 28 de junio. El acontecimiento acabó transcurriendo con normalidad, pero la seguridad de los participantes colgó de un hilo, ya que el grupo de extrema derecha, Patriot Front (Frente Patriota), había planeado organizar disturbios a la marcha.
La llamada de un vecino alertó a la policía. El ciudadano advirtió a las autoridades que había visto a un grupo de personas "vestidas como un pequeño ejército" saltar al interior de una furgoneta de mudanzas. Al acudir la policía se han encontrado 31 miembros del grupo de extrema derecha que se disponían a asaltar la celebración del Orgullo LGTBI. Todos juntos iban vestidos iguales, con camisetas azul marino, pantalones caqui, pasamontañas y gorras. En las vestimentas de algunos de los miembros del grupo extremista se podía leer las palabras "reclaim america", un eslogan de la extrema derecha que anima a recuperar una imagen aspiracional de América donde colectivos como LGTBI, las mujeres o las personas racializadas no cuentan con los derechos y las libertades actuales.