No es sólo Escocia: la mayoría británicos dan para hacer que el Reino Unido se acabará rompiendo. Una nueva encuesta llevada a cabo por el Ipsos UK revela que la mayoría de los ciudadanos del Estado británico creen que el Reino Unido "dejará de existir en su forma actual" dentro de diez años. El estudio, que divide los resultados según la nacionalidad de los 6,944 adultos encuestados, muestra que tanto los ingleses como los galeses, los escoceses y los norirlandeses tienen poca confianza en la configuración política actual a medio y largo plazo. Aparte, la encuesta también les ha preguntado sobre los prospectos económicos en el próximo año y también por una Escocia independiente.
Los ciudadanos del Reino Unido no confían en la continuidad de la Unión
Actualmente, el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte está formado por cuatro países. Cada uno de estos tiene una relación diferente con el resto de la Unión, con una autonomía, competencias y poder legislativo desiguales según su tratado de devolución. En la investigación ya mencionada, la gran mayoría de los encuestados de todas las naciones cree que, dentro de un año, la configuración de la Unión permanecerá la que es ahora. Más concretamente, lo hacen un 75% de los ingleses, un 79% de los escoceses, un 78% de los galeses y un 81% de los norirlandeses. Sorprende que estos últimos sean los que menos prevén un cambio a corto plazo, quizás ante el bloqueo político en el cual se encuentran desde hace meses a raíz de los desacuerdos por el tratado del Brexit. Con todo, la cosa cambia cuando imaginan el futuro a medio y largo plazo.
Los que auguran que la ruptura de la Unión será más bien son los escoceses: un 49% cree que dentro de cinco años ya no existirá, por delante del 42% que sí que lo hace, mientras que un 9% no sabe contestar. Para el mismo marco temporal, sin embargo, los ciudadanos del resto de nacionalidades que predicen un cambio estructural no superan el 40%. La cosa cambia radicalmente cuando piensan a 10 años vista, y es que la mayoría de todas las nacionalidades reconoce que no le ven un futuro a la Unión a medio plazo, una tendencia que se intensifica todavía más cuando les preguntan lo mismo, pero a 20 años vista. En este periodo de tiempo, ahora son los norirlandeses los más radicales: solamente un 11% cree que la Unión seguirá igual, y empatan con Escocia en un 67% los que piensan que dejará de existir dentro de dos décadas.
Los escoceses, divididos sobre los prospectos económicos
En cuanto a la posibilidad que Escocia vuelva a votar en un referéndum de autodeterminación, los encuestados parecen divididos sobre los prospectos económicos de un futuro estado independiente escocés. En el conjunto de la Unión, la opinión generalizada es que tanto Escocia como el resto del Reino Unido perderían en términos económicos. Si bien es verdad que un 42% de los escoceses creen que saldrían ganando si se marcharan, un 43% piensa todo el contrario. Los que más están de acuerdo con eso son los norirlandeses, aunque solamente un 28% cree que sería bueno para la economía escocesa. Por el contrario, los que menos confianza tienen son los ingleses, con un 18% que reconoce que les iría mejor. Por el contrario, los encuestados de todas las nacionalidades parecen muy divididos sobre en qué posición económica quedaría el Reino Unido sin Escocia. Los más optimistas son los ingleses, aunque no por mucho-- solo un 21% cree que les iría mejor sin ellos--, mientras que un 35% reconoce que les afectaría negativamente y un 31% contestación que "no marcaría una diferencia" que Escocia se independizara. Con respecto a los escoceses, un 45% cree que a los británicos les irá peor sin ellos, y empatan con los norirlandeses en un 12% que cree que la economía de la Unión mejoraría.