Al menos 72 palestinos han muerto en las últimas horas en los bombardeos israelíes contra varios edificios residenciales en la asediada urbe de Beit Lahia, en el norte de Gaza, según ha informado el gobierno de la Franja, en manos de Hamás, que reportó también otros 24 muertos en los campamentos de Nuseirat y Bureij. "El Ejército de ocupación (israelí) sabía que en esas casas y edificios residenciales se encontraban decenas de civiles desplazados, la mayoría de los cuales eran niños y mujeres desplazados de sus barrios", denunció hoy la Oficina de medios del grupo islamista palestino en un comunicado.

Según la nota informativa, en los dos ataques contra los campamentos de Nuseirat y Bureij (centro) otros 60 gazatíes resultaron heridos, y algunas de las víctimas fueron trasladadas al Hospital Al Awda y al de los Mártires de Al Aqsa, en la ciudad de Deir al Balah, también en la zona central. A principios del mes de octubre las tropas israelíes retomaron su ofensiva, por tercera vez, contra el norte de Gaza, dando lugar a un cerco militar y a continuos bombardeos con el objetivo, según fuentes militares, de evitar que Hamás se reagrupe en esa zona.

Desde entonces, unos 2.000 palestinos han muerto —según cifras locales— y los tres principales hospitales de la zona, que también han sido atacados por Israel (el Kamal Adwan, el Indonesio y el Al Awda) funcionan parcialmente. A eso se suma la poca ayuda humanitaria que entró al norte de Gaza en octubre y que podría derivar en una hambruna "inminente", según han alertado en estos últimos días diferentes organismos internacionales, entre ellos la ONU.

Más de 43.800 muertos confirmados desde octubre de 2023

La continua agresión israelí contra Gaza desde octubre de 2023 ha provocado ya más de 43.800 muertes documentadas —cerca del 70 % mujeres y niños— y más de 103.600, si bien son cifras que podrían aumentar, ya que un número indeterminado de víctimas siguen bajo escombros. Los ataques de Israel continúan a pesar de los llamamientos del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas a un alto el fuego inmediato y de las directivas de la Corte Internacional de Justicia para que se tomen medidas para evitar un genocidio.

Precisamente este domingo se ha conocido que el Papa Francisco, por su parte, ha instado a investigar los potenciales actos de genocidio de Israel sobre Palestina en "La esperanza no defrauda nunca", su nuevo libro. "Pienso sobre todo en quién deja Gaza en medio de la carestía que ha golpeado a los hermanos palestinos frente a la dificultad de hacer llegar comida y ayuda en su territorio", agrega el Pontífice en la obra.

Once muertos en el Líbano tras un nuevo ataque israelí

Paralelamente, al menos once personas han muerto este domingo en varios ataques israelíes contra varias localidades en el sur del Líbano, según la Agencia Nacional de Noticias (ANN) libanesa, que informó de ataques con fósforo blanco contra el municipio de Al Jiam, dónde no se han contabilizado víctimas hasta el momento. En un breve comunicado, ANN informó de la muerte de una persona en un bombardeo israelí esta madrugada contra Yadida Marjayoun, que causó también heridas a otros tres individuos que la Cruz Roja Libanesa trasladó al hospital público de la localidad de Hasabia. El resto de fallecidos se localizaron en la ciudad de Nabatiye, donde los equipos de Defensa Civil están levantando escombros de una vivienda que fue atacada esta noche y en la que murió una familia de siete miembros. Asimismo, recuperaron otros tres cadáveres, cifra que podría incrementarse a medida que avancen las labores de rescate, que se ven "dificultadas por la falta de grandes maquinarias para levantar los escombros rápidamente", apuntó ANN. Desde el inicio del fuego cruzado entre el grupo chií libanés Hizbulá e Israel el 8 de octubre de 2023, un día después del comienzo de la guerra en Gaza, el Líbano ha registrado 3.452 muertos, así como 14.664 los heridos, según el Ministerio de Salud Pública del país mediterráneo.

Tres detenidos sospechosos de lanzar bengalas a la casa de vacaciones de Netanyahu

Por otro lado, la Policía israelí ha arrestado esta madrugada a tres sospechosos por el lanzamiento de dos bengalas contra una residencia privada de Netanyahu en la urbe costera de Cesarea, a unos 100 kilómetros al norte de Jerusalén. "El tribunal ordenó una orden de silencio sobre los detalles de la investigación y la identidad de los sospechosos durante 30 días para evitar interrupciones o daños a la investigación", detalla un comunicado policial sobre la investigación conjunta con el Shin Bet (servicio de inteligencia nacional). No se han constatado daños en el incidente y, según fuentes policiales, Netanyahu y su familia no se encontraban en esta segunda residencia en el momento del suceso. Una ventana de esta misma vivienda fue dañada el mes pasado en un ataque con dron de Hizbulá.

Este episodio ha despertado el rechazo de diversos políticos, como el presidente israelí, Isaac Herzog, que lo ha calificado de "escalada peligrosa" que no debería preceder a un "aumento de la violencia en la esfera pública", según denuncia en un comunicado. A su vez, el ministro de Justicia, Yariv Levin, lo ha descrito como el último “eslabón de una cadena de acciones violentas y anárquicas, cuyo propósito es provocar el asesinato del primer ministro y el derrocamiento del gobierno electo mediante un golpe violento”. Por su parte, el ministro de Seguridad Nacional, el colono y ultranacionalista Itamar Ben Gvir, declaró que “la incitación contra el primer ministro Benjamín Netanyahu ha cruzado todos los límites”, reprobó en X. El recientemente asignado ministro de Defensa, Israel Katz, también dijo hoy en X que este acto equivale a "cruzar todas las líneas rojas", y que Netanyahu "amenazado por Irán y sus aliados que están intentando asesinarle, no puede estar sujeto a las mismas amenazas dentro de casa".