Cerca de un centenar de mercenarios de Wagner armados, del total de 1.200 que se encuentran actualmente en Bielorrusia, se han desplazado hasta el camino más corto entre Bielorrusia y Kaliningrado, considerado el punto débil de la parte oriental de la OTAN, a solo cinco kilómetros de distancia del territorio de la Alianza. Así lo destaca el diario ABC, aunque especifica también que no está claro cuál es su misión allí.

El gobierno de Polonia cree que se harán pasar por inmigrantes ilegales para infiltrarse en su territorio, aprovechando el flujo ilegal que ha provocado desde hace meses Bielorrusia, destaca el mismo artículo. Ya se ha comentado a la población de la frontera, que normalmente proporciona alimentos y ropa de abrigo a los inmigrantes ilegales que logran cruzar la frontera, que estén alerta ante la presencia de migrantes de habla rusa.

El primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, por su parte, ha subrayado la importancia estratégica de la estrecha franja de terreno, en los alrededores de la localidad bielorrusa de Grodno. El mismo diario constata, además, que Morawiecki ha considerado este desplazamiento como un paso más en lo que ya se conoce como "guerra híbrida". La guerra que libra el régimen bielorruso contra Polonia, que solo este año ya ha empujado a territorio polaco a 16.000 inmigrantes, la mayoría procedentes de Oriente Próximo. "Ahora la situación se ha vuelto aún más peligrosa" ha dicho, porque los mercenarios rusos también podrían dar apoyo a la guardia fronteriza bielorrusa a la hora de "empujar a inmigrantes ilegales" a cruzar la frontera, con el fin de desestabilizar Polonia.

La contraofensiva ucraniana no funciona, según el Kremlin

Paralelamente a estos movimientos en la frontera, el Kremlin ha asegurado este lunes que "el régimen de Kyiv está en una situación muy, pero que muy difícil", porque su contraofensiva no ha tenido éxito, lo que le lleva a lanzar "ataques terroristas" contra objetivos civiles.

"El régimen de Kyiv no tiene éxitos. Además, el régimen de Kyiv se encuentra en una situación muy, pero que muy difícil, dijo el portavoz de la presidencia rusa, Dmitri Peskov, en la rueda de prensa telefónica diaria.

Ha añadido que la contraofensiva lanzada por Ucrania a principios de junio pasado "no se está desarrollando tal como se planeó en Kyiv". "Es obvio que los recursos multimillonarios que fueron transferidos por los países de la OTAN al régimen de Kyiv se gastan de manera ineficiente y sin objetivos claros", ha detallado Peskov. En su opinión, esta circunstancia suscita preguntas en las capitales occidentales y causa "desasosiego entre los contribuyentes".

"Y, sin ningún tipo de duda, con estos fracasos de fondo, se producen actos de desesperación y, claro está, el régimen de Kyiv recurre a la táctica de los atentados terroristas", ha subrayado el portavoz, al comentar el ataque con drones de este domingo contra Moscú.

Ha añadido que "se trata de ataques dirigidos contra objetivos civiles". "Es abominable, y seguiremos luchando contra ellos", ha recalcado el portavoz.

 

Imagen principal: el presidente bielorruso, Alexandr Lukashenko / Efe