Nuevo paso adelante del presidente argentino, el ultra Javier Milei, en cumplimiento de la promesa de reducción de los organismos y personal del Estado. El gobierno argentino avanza en la ejecución de sus polémicas recetas económicas de carácter neoliberal para tratar de reavivar la estropeada economía del país sudamericano, que ha sufrido recurrentes crisis a lo largo de décadas. Si el miércoles Milei adelantó que despediría a 50.000 trabajadores públicos más, después de los 25.000 que ya ha dejado en la calle, con el objetivo de reducir el gasto público, este jueves el mandatario argentino ha anunciado el cierre de los vestigios de lo que había sido el Ministerio de la Mujer, el departamento encargado de la protección contra la violencia de género, durante el anterior Gobierno, que encabezó el peronista Alberto Fernández (2019-2023). Un cierre al cual el mandatario derechista añade al motivo económico también el ideológico, en tanto que lo considera un organismo "politizado" y que "impone una agenda ideológica". Antes de la disolución definitiva, durante los últimos meses, el departamento se había reconvertido en una subsecretaría adherida a otra cartera ministerial.

Lo ha anunciado oficialmente el Ministerio de Justicia argentino. "En línea con el mandato del presidente Javier Milei de reducir el tamaño del Estado y de eliminar los organismos politizados, en diciembre de 2023 —fecha en la cual asumieron las nuevas autoridades— el Gobierno Nacional dispuso que el Ministerio de Mujeres, Género y Diversidades se transformara en una Subsecretaría mientras se completaba su cierre", se ha recordado en un comunicado oficial. Esta dependencia pasó a la órbita del Ministerio de Justicia y hoy se ha resuelto su eliminación definitiva, agrega la nota.

Según argumenta el Gobierno de Milei, el ahora ya extinto Ministerio de la Mujer "fue creado y utilizado por la Administración anterior con finalidades políticos-partidarios, para propagar e imponer una agenda ideológica, contratar militantes, y organizar charlas y acontecimientos". "Ninguna de sus acciones concluyó en la baja del índice del delito", en alusión al número de feminicidios que se registran en el país, una media de 245 al año. "Por el contrario, el pueblo argentino fue testigo de su sesgo ideológico en la defensa discriminatoria de las víctimas", agrega la nota del Ministerio de Justicia.

"Dinero que a Argentina no le sobra"

La Administración Milei asegura haber detectado en una auditoría interna que "en el área de la Subsecretaría de Género existía una clara superposición de funciones con diferentes agencias gubernamentales que se dedican a la misma tarea". "Eso implicaba un sobre mantenimiento de edificios, estructuras y más ochocientos empleados, con diferentes sueldos, dinero que al Estado argentino no le sobra," recalcó el departamento de Justicia. El Gobierno de Milei enfatiza que la decisión es pertinente al afirmar: "Esta decisión responde a nuestro compromiso con la transformación, de hacer más eficiente y reducir el Estado, continuando siempre con la defensa y protección de la ciudadanía contra la violencia".

La titular de la Subsecretaría de Protección contra la Violencia de Género, Claudia Barcia, ayer jueves presentó su renuncia al cargo, avanzando ya la decisión del gobierno de Milei. Barcia subrayó que se eliminaba este organismo en un país en el cual, de media, cada 35 horas muere una mujer a causa de la violencia machista. La renuncia de Barcia se produce después de que el lunes pasado miles de personas realizaran la marcha 'Ni una menos', para reclamar la declaración de "emergencia nacional" por la violencia machista y expresar su repudio a las reformas del Ejecutivo, a quien critican para restringir las políticas públicas en materia de género.

En la Subsecretaría trabajaban unas 800 personas que estaban abocadas a tareas de acompañamiento y protección de las víctimas de violencia machista, así como a desarrollar acciones de reparación. "Las misiones fijadas por la Ley y las Convenciones Internacionales seguirán cumpliéndose en el seno de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación y otros en el ámbito de la Secretaría de Justicia, ambas Dependientes del Ministerio de Justicia", aseguraron desde el gobierno argentino. En suma, Milei ha reducido al Ejecutivo argentino a uno pugnado de ministerios: los relativos al orden público, la Defensa, la Justicia y la economía. Todas las políticas sociales quedan reducidas a una cartera denominada "de Capital Humano".