La ciudad alemana de Riesa es el escenario escogido por el partido de extrema derecha Alternativa por Alemania (AfD) para celebrar su congreso. En las puertas de unas elecciones que se auguran muy positivas para la formación de extrema derecha, el partido dirigido por Alice Weidel pretendía dar una imagen triunfante en este congreso. Sin embargo, ha quedado retrasado por las protestas de miles de manifestantes antifascistas, siendo un recordatorio de cómo está de dividida la sociedad alemana. La policía cuenta con que en las protestas de hoy participen hasta 10.000 manifestantes venidos de toda Alemania en aproximadamente 200 autobuses.

Las protestas han empezado de madrugada, cuando los organizadores han cortado temporalmente la carretera B169 a la altura de Riesa, según ha informado la policía. Los organizadores de las protestas, una alianza contra la extrema derecha denominada Widersetzten (Oponerse, en alemán), han anunciado a través de Twitter (ahora X) que han conseguido "bloquear casi todos los accesos al congreso de la AfD".

La organización ha denunciado la represión recibida por parte de la policía. La movilización antifascista ha mantenido un tono pacífico desde la madrugada. En momentos puntuales, los manifestantes han roto el cordón policial y han sido reprimidos por la policía que ha llegado a utilizar perros contra algunos manifestantes.

Justamente hace un año que Alemania vivió una movilización masiva contra la AfD, con protestas en que llegaron a participar casi un millón de personas de forma simultánea en todo el país, después de que se filtrara la implicación de miembros del partido en un encuentro de extremistas de derechas en que se debatieron planes para expulsar de Alemania inmigrantes y ciudadanos de origen extranjero.

Congreso retrasado (no suspendido)

Un portavoz de la AfD, Bernd Baman, ha tildado a los manifestantes de "extremistas" y ha asegurado que es "una catástrofe" que los manifestantes hayan conseguido retrasar el inicio del congreso. El diputado regional Robert Lambrou ha asegurado que había conseguido entrar en el recinto después de andar dos horas a pie, pero que algunos de sus compañeros habían sufrido ataques a sus vehículos.

Aunque más tarde de lo esperado, se prevé que en este congreso se ratifique la candidatura a la cancillería de la colíder Alice Weidel y se apruebe el programa electoral de la formación de extrema derecha.