La presidenta pro-occidental de Moldavia, Maia Sandu, ha culpado este domingo por la noche de los resultados de un referéndum crucial sobre la adhesión a la UE, porque estaba demasiado reñido para declarar un ganador con la mayoría de los votos contados. En este sentido, lo ha tildado de "ataque sin precedentes a la libertad y la democracia de nuestro país" por parte de "fuerzas extranjeras". Los moldavos han acudido este domingo, pues, a las urnas para emitir su voto en una elección presidencial y un referéndum de la UE. Una votación que habría marcado un momento clave al tira y afloja entre Rusia y Occidente sobre el futuro del pequeño país sin salida al mar del sureste europeo con una población de cerca de 2,5 millones de personas.
El referéndum sobre en UE se ha celebrado coincidiendo también con las elecciones presidenciales, donde Maia Sandu ha sido la primera opción (41,98%) por delante del prorruso Alexandr Stoianglo (26,31%). Los dos tendrán que enfrentarse a una segunda vuelta que se celebrará el 3 de noviembre, porque ninguno de los dos candidatos ha llegado al 50% de los votos necesarios.
La mandataria ha dicho, a última hora de la noche, que el país "ha sufrido un ataque sin precedentes contra la libertad y la democracia", tanto durante el domingo, que se celebraba este referéndum para ingresar en la Unión Europa y las elecciones presidenciales, como "en los últimos meses". "Los grupos criminales, en colaboración con fuerzas extranjeras hostiles a nuestros intereses nacionales, han atacado nuestro país con decenas de millones de euros, mentiras y propaganda, han utilizado los medios más vergonzosos para mantener nuestra nación atrapada en la incertidumbre e inestabilidad".
"Pruebas claras"
La mandataria asegura que tiene "pruebas claras" que "estos grupos criminales" pretendían comprar 300.000 votos, lo que ha calificado de "fraude de una escala sin precedentes". "Su objetivo era socavar el proceso democrático. Su intención es sembrar el miedo y el pánico en la sociedad. No nos rendiremos en la defensa de la democracia y la libertad", ha expresado.
Moldavia presentó la solicitud de adhesión a la UE el 3 de marzo del 2023 y tres meses después, el bloque comunitario abrió negociaciones formales. La oposición prorrusa contestó al paso de gobierno con la creación de una coalición llamada Victoria, con el propósito principal de denunciar la adhesión a la UE.
Comprar los votos para no alejarse de Putin
Las acusaciones contra Moscú incluían financiación de grupos de oposición pro-Kremlin, difusión de desinformación, interferencia a elecciones locales y apoyo a un importante plan de compra de votos. En particular, los funcionarios acusaron al empresario prorruso fugitivo Ilan Shor, un opositor declarado a la adhesión a la UE, de llevar a cabo una campaña desestabilizadora desde Moscú.
A principios de este mes, la cabeza de la policía nacional, Viorel Cernăuțanu, acusó a Shor y Moscú de establecer un complejo plano de compra de votantes "al estilo mafioso" y de sobornar a 130.000 moldavos (casi el 10% de la participación electoral normal) para que votaran en contra del referéndum y a favor de candidatos amigos de Rusia en lo que llamó un "ataque directo sin precedentes".