Se ha muerto O. J. Simpson a los 76 años a causa del cáncer de próstata que sufría, según ha anunciado este jueves su familia en las redes sociales. "El 10 de abril, nuestro padre, Orenthal James Simpson, sucumbió a su batalla contra el cáncer. Estaba rodeado de sus hijos y nietos. Durante este tiempo de transición, su familia pide que se respeten sus deseos de privacidad y dignidad", han expresado los familiares en Twitter.
Nacido en San Francisco (California, EE.UU.) en 1947, O. J. Simpson fue uno de los mejores jugadores de fútbol americano de la historia. Sin embargo, es internacionalmente conocido por su mediático juicio y su polémica absolución penal por el asesinato de su exmujer Nicole Brown y su amigo Ron Goldman en 1994. Años después, sí que fue declarado responsable de las muertes en una demanda civil de las familias de las víctimas y fue condenado a pagar 33,5 millones de dólares.
On April 10th, our father, Orenthal James Simpson, succumbed to his battle with cancer.
— O.J. Simpson (@TheRealOJ32) April 11, 2024
He was surrounded by his children and grandchildren.
During this time of transition, his family asks that you please respect their wishes for privacy and grace.
-The Simpson Family
En 1994, Brown y Goldman fueron encontrados muertos a puñaladas fuera del dúplex propiedad de la exmujer. Simpson fue acusado del asesinato, detenido y juzgado en el juicio más ampliamente publicitado por la prensa norteamericana. En 1995 fue absuelto y el veredicto fue seguido por televisión por más de la mitad de la población de EE.UU., convirtiéndolo en uno de los acontecimientos más vistos en la historia del país. Hubo muchas críticas sobre el procesamiento y la actuación policial, motivo por el cual muchas personas afirman que Simpson habría sido declarado culpable si no fuera por los errores e irregularidades del proceso. A pesar de la absolución, su imagen pública se hundió: tanto como de exestrella de la NFL como de actor.
La cosa no acabó aquí. En 1997, un jurado civil de Santa Mónica (California) lo declaró responsable de las muertes y Simpson fue obligado a pagar 33,5 millones de dólares por daños. Eso sí, una ley californiana evitó que tuviera que pagar, de manera que no tuvo que renunciar a su estilo de vida. Esto es así hasta el punto que en 2008 fue acusado de conspiración criminal, secuestro, asalto y robo en un casino de Las Vegas y declarado culpable de todos los cargos, entre muchos otros juicios por los cuales pasó.