Al menos 136 personas han muerto y 185 han resultado heridas a consecuencia de un terremoto de magnitud 6,4 en el oeste de Nepal este viernes por la noche, que ha obligado al gobierno a movilizar ya en tres agencias de rescate para ayudar a los heridos. El portavoz del ejército nepalés, Krishna Prasad Bhandari, ha detallado que las operaciones de rescate continúan y que, aparte de los 132 muertos confirmados, centenares de viviendas han quedado dañadas, y, por lo tanto, el número de víctimas mortales puede aumentar durante la jornada.

El seísmo se ha producido esta madrugada con una magnitud de 6,2 en el distrito de Jajarkot, según ha informado el Centro Nacional de Monitorización e Investigación de Terremotos de Nepal, y también ha afectado gravemente la región vecina de Rukum a Occidental. Ambas zonas destacan por su carácter montañés y difícil acceso por carretera.

Centenares de efectivos en las zonas afectadas

El Servicio Geológico de los Estados Unidos ha rebajado la magnitud del terremoto en 5,6. El portavoz nepalés ha informado de que se han enviado equipos médicos y oficiales para la búsqueda y rescate desde Katmandú con helicópteros. Bhandari ha detallado que el número mayor de víctimas mortales se concentra en Jajarkot con 95 muertos. Las autoridades nepalesas han desplegado centenares de efectivos en las zonas afectadas, pero las tareas de búsqueda se están viendo afectadas por el complicado del terreno en los dos distritos afectados. El subinspector adjunto de la estación de Policia de Jajarkot, Narendra Gautam, ha indicado que en buena parte de las zonas afectadas no hay red de telefonía móvil ni electricidad.

Katmandú, más expuesto a los terremotos

Nepal es uno de los países más propenso a desastres naturales, y tiene una población muy vulnerable—mayoritariamente pobre—, y además, no tienen una infraestructura potente como para hacer frente a inundaciones o terremotos. Junto con la Asociación Asiático de Preparación (APP), una alianza creada para coordinar una respuesta a las emergencias entre varios países asiáticos, Katmandú es la capital nacional expuesta al riesgo mayor de terremotos entre 21 megaciudades de todo el mundo.

El 25 de abril de 2015, un terremoto de magnitud 7,8 sacudió Nepal, que provocó la destrucción de edificios de varios pisos en Katmandú, y provocó deslizamientos del suelo y avalanchas en las montañas. En aquella ocasión, murieron casi 9.000 personas y más de 22.000 resultaron heridos. Además, centenares de ciudadanos se quedaron sin hogar y el seísmo provocó unos daños valorados en cerca de 6.470 millones de euros. Más de 7 años más tarde, las tareas de reconstrucción todavía duran.