Bielorrusia había acogido algunas conversaciones de paz –o intentos– entre delegados de Ucrania y de Rusia. Sin embargo, desde hace semanas, no se oye hablar de estas conversaciones. Hace unos días, Ucrania expuso que si se celebraba un referéndum en Jérson, el país se retiraría de esta mesa de negociaciones. El ambiente, enrarecido, lejos de destensarse, ha ido a peor. Las imágenes de Bucha, Borodyanka o Mariúpol no han ayudado mucho a relajar el ambiente. ¿En este contexto, donde han quedado las conversaciones? ¿Se siguen produciendo? Rusia ha escogido un día simbólico como el de este lunes, 9 de mayo, Día de la Victoria, para asegurar que las negociaciones con Ucrania para poner fin a la campaña militar rusa en el país continúan de manera digital. Así lo ha manifestado el negociador jefe de Moscú, Vladímir Medinski. "Las negociaciones se hacen en formato remoto, no han parado", ha señalado la agencia de noticias rusa Interfax.
Medinski ha descartado que, hoy por hoy, haya reuniones cara a cara con representantes ucranianos. Según constata, "harían falta cosas más específicas sobre la mesa". El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, propuso el 26 de abril pasado elevar el proceso de paz de Estambul al nivel de líderes para acoger en Turquía una cumbre entre los presidentes de Rusia, Vladímir Putin, y de Ucrania, Volodímir Zelenski.
Este último se ha mostrado abierto desde el inicio de la ofensiva militar rusa a reunirse personalmente con Putin. Pero parece que el líder del Kremlin no está dispuesto a sentarse con su homólogo de Ucrania hasta que este acepte las condiciones rusas, entre ellas la independencia del Donbás y de la península de Crimea, anexionada por Rusia en el 2014.
Erdogan considera que se tiene que mantener el "impulso positivo" de las negociaciones celebradas en Estambul entre delegaciones de los países enfrentados, que eso beneficiaría las dos partes y abriría el camino hacia una paz de interés para todo el mundo.
El discurso de Putin, hacer frente a la OTAN
Las tropas y las milicias de Donetsk y Lugansk luchan por su patria, por su futuro y para que nadie olvide las lecciones de la Segunda Guerra Mundial. Así lo ha puesto de manifiesto el presidente ruso, que ha constatado que "no hay sitio para los nazis". "Hoy las milicias del Donbás, al lado del ejército ruso, luchan en su propio territorio. Ahora me dirijo a nuestras tropas y milicias en el Donbás: están luchando por su patria, por su futuro, para que nadie olvide las lecciones de la Segunda Guerra Mundial, para que no haya lugar para los nazis", ha señalado el mismo Putin. El discurso lo ha pronunciado desde la plaza Roja, para conmemorar el día 9 de mayo, Día de la Victoria.
Eso no ha sido lo único, sin embargo, que ha expuesto Putin en su discurso. Si no que ha puesto de manifiesto que Rusia "ha hecho un ataque preventivo" en Ucrania ante la amenaza de la OTAN y Occidente, y ha asegurado que fue "una medida necesaria" y la "única posible" en esta situación.