Un neonazi ha sido detenido en Finlandia por haber apuñalado a un niño de 12 años, según ha informado este viernes la Oficina Nacional de Investigación de Finlandia (KRP). Los hechos sucedieron este jueves en un centro comercial en la ciudad de Oulu, al nordeste de Finlandia, cuando el agresor atacó a un grupo de tres menores con un arma blanca. Según los testigos presenciales, apuñaló repetidamente por la espalda al chico de 12 años, y después intentó atacar otro de los niños, de 14 años, pero un guardia de seguridad lo detuvo. La víctima, de nacionalidad finlandesa, pero de origen extranjero, sufrió heridas graves y tuvo que ser trasladada de urgencia a un hospital, donde continúa ingresada. A pesar de la gravedad, su vida no corre peligro, según el último informe médico.

El superintendente de la KRP, Ari Soronen ha identificado el presunto agresor como Sebastian Lämsä, un hombre nacido en 1990, vinculado a movimientos de extrema derecha en el país y con múltiples antecedentes penales, motivo por el cual sitúa la agresión como un caso de violencia extremista por motivos racistas. Soronen ha agradecido la rápida actuación de los guardias de seguridad del centro comercial, que atendieron al chico herido y redujeron al agresor cuando intentaba huir, hasta que la policía lo detuvo. Lämsä se enfrenta a dos cargos de intento de asesinato, con la agravante por las supuestas motivaciones racistas y por el hecho de que las víctimas eran menores. El primer ministro de Finlandia, Petteri Orpo, ha condenado el ataque, que ha calificado de "enfermizo y repugnante". En declaraciones a  Ilta-Sanomat ha advertido que "el auge de extrema derecha es una amenaza real para Europa y la sociedad finlandesa" y ha reclamado detener su crecimiento y erradicarla. "Este acto se tiene que tomar muy seriamente", ha afirmado.

Medios finlandeses han identificado a Lämsä como un "antiguo miembro clave" del Movimiento de Resistencia Nórdico (PVL, por las siglas en finés), una organización neonazi que fue ilegalizada en 2020. Además, acumula varias condenas por actos de violencia relacionados con la extrema derecha. En 2012 roció con espray pimienta a un político de izquierdas durante un evento del orgullo LGTBI en Oulu, y a principios del 2013 irrumpió en la biblioteca de la ciudad de Jyväskylä, donde se presentaba un libro sobre el movimiento de la extrema derecha en el país, después de que le hubieran negado la entrada. Se produjo una pelea en la cual Lämsä acabó apuñalando a una persona. Después de aquel momento huyó y la policía no lo pudo tener hasta casi dos años más tarde, y finalmente en el 2015 fue condenado por esta agresión a un año y medio de prisión, pena que fue suspendida. Finalmente, también es sospechoso de preparar un ataque contra la salud pública.