La provincia argentina de Santa Fe (centro), asediada por la violencia del narcotráfico, ha implementado métodos del estilo Bukele para bregar con detenidos de alto perfil en una de sus prisiones, según ha compartido a través de sus redes sociales la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich. "En las prisiones federales contamos con el Protocolo de Gestión para Presos de Alto Riesgo, con el que controlamos uno por uno a los narcos de Santa Fe para que no actúen y para que la prisión no sea un lugar del delito", escribió en X, antes conocida como Twitter. La polémica nace de la fotografía con que acompañaba este tuit: 25 reclusos divididos en tres hileras, sentados en el suelo, con las piernas abiertas a corta distancia de sus compañeros de celda, con el torso descubierto, las manos atadas detrás de la espalda y la cabeza gacha. Todo componía una imagen familiar en otro país de América Latina: El Salvador.

El método con que se han detenido y encarcelado es similar al utilizado por el presidente de El Salvador, Nayib Bukele. De hecho, el gobernador de la provincia, Maximiliano Pullaro -muy próximo a la ministra Bullrich-, inició una fuerte campaña de lucha contra el narcotráfico desde que asumió el cargo el 10 de diciembre pasado. "Seguiremos ajustando los controles a prisiones, restringiendo visitas, requisando, aumentando el patrullaje, investigando y reforzando la seguridad a las prisiones. Los que están tomados, están tomados, y se quedarán, y si no lo entienden, la pasarán mal", publicó Pullaro.

Por su parte, además de la proximidad con este gobernador, Bullrich se encontró con Bukele en Estados Unidos, donde alabó las políticas del salvadoreño. "Queremos seguir el modelo que Ustedes están tirando adelante", afirmó la ministra argentina, según informa El Mundo. Bullrich se deshizo en elogios sobre la actuación de Bukeles con el narco, pero si la ministra quiere importar el modelo a Argentina no lo tendrá fácil. Más allá de la violación de los derechos humanos, la situación del narco en Argentina no tiene nada que ver con la de El Salvador, así como el propio tamaño del país. Esta deriva ha despertado críticas dentro y fuera del país.

Bukele se refuerza en el poder

La Constitución de El Salvador no permitía hasta hace poco que un dirigente se presentara a la reelección, sin embargo, la presión de Nayib Bukele y su partido Nuevas Ideas (NI) y su presencia institucional abrieron el camino para cambiar esta situación. Con vía libre para presentarse a la reelección, Bukele no solo optó a la presidencia del país de nuevo, sino que arrasó en los comicios. Bukele ya empezó a hacer pasos para presentarse a la reelección en el año 2021, cuando la Sala Constitucional de la Corte Suprema cambió un criterio de interpretación de la Constitución. Los jueces afirmaron que la prohibición de presentarse a la reelección solo era aplicable a un mandatario que hubiera estado en el poder una década, pero hasta antes de este cambio interpretativo, el gobernante tenía que esperar diez años por poder optar a la presidencia una vez acabado el primer mandato.