Nuevo embate del presidente de México contra España. Ya hace tiempo que Andrés Manuel López Obrador insiste que el Estado español tiene que pedir perdón por la conquista española en el territorio que actualmente es México. Según él, hay que reparar el daño que se hizo a las tribus indígenas que había en aquella época y que, por lo tanto, España tiene que pedir disculpas por el genocidio que implicó invadir el continente americano. Delante de este escenario, en el cual el Estado español no da ningún paso para solucionar la situación, López Obrador ha puesto sobre la mesa la idea de "hacer una pausa" en las relaciones entre México y España. Según él, esta acción permitiría girar la hoja a una etapa en la cual, según el mandatario mexicano, las autoridades y las empresas españolas se han aprovechado del país americano.

"Eran como amos de México", ha manifestado López Obrador en unas declaraciones que se suman a un listado de ataques contra la actitud que tiene España en relación con esta cuestión. El presidente mexicano ha pronunciado estas palabras en una atención a los medios de comunicación de su país, en la cual ha asegurado que "la relación" entre México y España "no es buena". Está por este motivo que ha opinado que hacer una "pausa" en la relación bilateral "conviene" a las dos partes. "Quizás cuando cambie el gobierno se restablecen las relaciones y yo desearía que cuando ya no sea, no sean como eran antes", ha añadido. También ha manifestado que México se ha llevado "la peor parte" de la "promiscuidad" económica y política en las relaciones bilaterales de las últimas décadas. "Nos saqueaban", ha sentenciado ante los medios López Obrador.

 

"Queremos tener buenas relaciones, pero no queremos que nos roben", ha manifestado López Obrador, además de insistir que el Gobierno todavía ve México como una "tierra de conquista". Según el mandatario mexicano, el "saqueo" español no se produjo solo hace centenares de años cuando España invadió el continente americano, sino que se ha mantenido hasta ahora, también a través de los poderes económicos. "Es por eso que vale más que hacemos una pausa", ha insistido.

No es la primera vez que el presidente mexicano espolea a España por su actitud de no querer admitir que hace centenares de años perpetró un genocidio en tierras americanas y que hay que pedir disculpas. López Obrador ya insistió en el 2021, cuando se cumplieron 500 años de la efeméride. En aquella ocasión, renombró el episodio histórico como "la resistencia indígena". Pero según él, esta violencia se sigue perpetrando hoy día a través del sector económico. Concretamente, ha nombrado compañías del sector energético y de la construcción que hicieron contratos con las Administraciones de Vicente Fox (2000-2006), Felipe Calderón (2006-2012) y Enrique Peña Nieto (2012-2018).

El Gobierno, "sorprendido"

El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, ha manifestado su "sorpresa" por las declaraciones "súbitas" del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador. Albares cree que se han producido en un "contexto informal" y considera que no supone una "posición oficial" de México hacia España. "No tiene ninguna traducción oficial ni se nos ha comunicado nada", ha destacado el responsable del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación. Paralelamente, Albares ha instado a López Obrador a "aclarar sus palabras porque se contradicen con lo que dijo hace una semana".