Seis personas han muerto en un tiroteo perpetrado por dos supuestos terroristas este martes en el barrio de Jaffa, cerca de la estación de tranvía al sur de Tel Aviv, en el que han resultado heridas varias personas, según ha informado la prensa local. Cinco de los heridos están graves. Una fuente policial ha informado que los supuestos terroristas han sido neutralizados en el lugar de los hechos. El suceso ha provocado un gran despliegue policial en la zona y se están haciendo registros para ver si existen "amenazas adicionales". El tiroteo se ha producido justo unos minutos antes de que Irán empezara el ataque con mísiles contra Israel.
Los hechos han ocurrido en una zona comercial y los atacantes han bajado en una estación de metro ligero y han abierto fuego contra varios ciudadanos que estaban en el andén.
El ataque se produce en el mismo momento que las autoridades israelíes estaban haciendo llamadas a la población para que se refugiaran y no se movieran hasta nueva orden. Desde primera hora de la tarde, EEUU ha advertido que se esperaba un ataque inminente por parte de Irán, una respuesta a los últimos ataques de Israel que han causado la muerte de líder de Hezbollah. Este ataque ya se preveía que sería peor de lo ocurrido el pasado abril, cuando se lanzaron más de 300 proyectiles. La estrategia seguida por Irán implicaría estresar el sistema de defensa antiaérea de Israel.
Hamás celebra el ataque
El grupo islamista Hamás ha celebrado el ataque con disparos y arma blanca en Tel Aviv, que ha definido como una "heroica operación llevada a cabo por los héroes de nuestro pueblo", pero sin llegar a reivindicar el suceso. "Mientras bendecimos esta heroica operación, afirmamos que todos los actos heroicos llevados a cabo por nuestro heroico pueblo contra la ocupación sionista son una respuesta a su agresión y sus crímenes", ha dicho el grupo en un comunicado.
Ninguna milicia palestina ha reivindicado todavía el ataque, aunque los dos atacantes han sido identificados por el medio israelí Haaretz como Muhammad Khalef Saher Rajab y Hassan Muhammad Hassan Tamimi, de la localidad de Hebrón, en el sur de Cisjordania ocupada. El Ejército israelí ha impuesto un bloqueo militar sobre Hebrón y el ministro israelí de Finanzas, el ultraderechista Bezalel Smotrich, ha sugerido durante una reunión del Gobierno que las familias de los presuntos atacantes sean deportadas a la Franja de Gaza, recoge Haaretz.