El exatleta paralímpico sudafricano Oscar Pistorius ha obtenido la libertad condicional después de casi una década en la prisión para matar a su chica, Reeva Steenkamp. Las autoridades penitenciarias de Sudáfrica han decidido que Pistorius podrá salir de la prisión en enero de 2024. Después de ser encarcelado en el 2014, el exatleta habrá cumplido prácticamente 10 años de prisión por haber disparado a su pareja el día de San Valentín de 2013. Fue sentenciado a quince años de prisión, que se redujo a trece años y cinco meses de prisión, al descontarse el tiempo que Pistorius -que pasó una etapa en libertad bajo fianza y bajo arresto domiciliario- ya había estado en la prisión.

"El Departamento de Servicios Penitenciarios (DCS) confirma la libertad condicional para Oscar Leonard Carl Pistorius, efectiva a partir del 5 de enero del 2024", han anunciado las autoridades penitenciarias en un comunicado, después de que se celebrara una audiencia a puerta cerrada en la prisión de Atteridgeville, en Pretoria. Es la segunda vez que Pistorius solicita la libertad condicional, que le fue denegada el marzo pasado.

Antes de que empezara la audiencia de este viernes, la madre de la modelo asesinada, June Steenkamp, ha indicado que no está "convencida" de que Oscar se haya rehabilitado, según una carta leída por los abogados. "No creo en la versión de Oscar. (...) No conozco a nadie que lo haga. Mi querida hija gritó por su vida, lo bastante alto para que los vecinos lo escucharan", ha remarcado la madre de Reeva Steenkamp en una carta. "La rehabilitación requiere que una persona se comprometa honestamente con toda la verdad de su delito y sus consecuencias. Nadie puede decir tener remordimientos si no es capaz de comprometerse plenamente con la verdad", ha sentenciado a la misiva.

Una breve carrera atlética

Nacido con un problema genético que llevó a sus padres a decidir amputarle las dos piernas por debajo de las rodillas cuando tenía once meses, Pistorius consiguió fama mundial al correr a los Juegos Olímpicos de Londres (2012) sobre dos prótesis de carbono. Se lo llegó a apodar Blade Runner y se convirtió en un modelo a seguir.

Pistorius capitalizó su nueva fama y acumuló popularidad y fortuna, hasta que el día de San Valentin de 2013, cuando asesinó a su pareja. Le disparó cuatro veces a través de la puerta cerrada del baño e intentó defender sin éxito que había entrado en pánico al confundir el modelo con un ladrón que habría accedido a la vivienda por la ventana del baño.

 

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