El coronavirus ha parado muchas cosas, pero no el amor. Después de semanas de campaña intensa, la Comisión Europea avala que miles de parejas se han visto separadas por la pandemia puedan reencontrarse alegando la relación como motivo para poder viajar por la Unión Europea.
Las excepciones que permiten viajar los familiares para que se puedan reunir deja fuera de las parejas que no tienen la situación formalizada. Por eso Bruselas ha reclamado a los gobiernos que permitan la entrada de las parejas internacionales separadas por la pandemia. La eurocomisaría del Interior, Ylva Johansson, ha pedido esta semana que los estados que apliquen una definición más "amplia" del concepto de pareja para que las que no estén casadas se puedan reencontrar después de casi cuatro meses sin verse. "La pareja de un ciudadano o residente legal de la UE que tenga una relación duradera y acreditada tendría que estar exenta de las restricciones de viaje", ha defendido Johansson.
La Comisión Europea da respuesta así a una campaña para declarar "el amor" como "motivo esencial" para poder viajar a la UE.
El amor no es turismo
Desde marzo la entrada en la Unión Europea está prohibida para todos los extranjeros si no son "esenciales" o tienen familiares en territorio europeo. A partir de julio los estados ya pueden levantar restricciones a un reducido grupo de países, pero gran parte del mundo todavía tiene las puertas cerradas a Europa.
Por eso, las parejas internacionales afectadas han arrancado una campaña en Internet bajo el lema "el amor es esencial" para exigir a las autoridades que permitan la entrada aunque no estén casados.
Las etiquetas #LoveIsEssential #LoveIsNotTourism o #LiftTheTravelBan, las redes sociales han acumulado miles de casos de parejas que no pueden viajar desde países extracomunitarios a Europa, para reunirse con las personas con quienes aman.
Dinamarca ya ha dado este paso autorizando a las parejas que acrediten una relación larga con un europeo.