La Cámara baja del Parlamento austríaco ha aprobado una moción de censura contra el Gobierno de Sebastian Kurz, lo cual implica la caída automática del Ejecutivo y el comienzo de un periodo de transición hasta la convocatoria de elecciones anticipadas.
La moción, impulsada por los socialdemócratas, ha salido adelante gracias al apoyo del Partido de la Libertad de Austria (FPÖ), que de esta manera ha confirmado la ruptura definitiva con el Gobierno del cual formaba parte hasta este mismo mes. El presidente austríaco tiene que nombrar ahora a un nuevo canciller.
El vicecanciller Heinz-Christian Strache, del FPÖ, se vio obligado a abandonar al Ejecutivo después de la aparición de un vídeo del 2017 en el cual supuestamente ofrecía a un oligarca ruso contratos públicos a cambio de apoyo electoral. El veto se extendió también a todos los ministros ultraderechistas, sustituidos por tecnócratas.
El Partido Popular (ÖVP) de Kurz llegará a las próximas elecciones generales con el aval de su victoria en los comicios europeos de este domingo, en los cuales consiguió casi el 35% de los sufragios. El Partido Socialdemócrata (SPÖ) obtuvo el 23,4% de los votos, mientras que el FPÖ ha caído hasta el 17,2%.