La Agencia Federal de Transporte Marítimo de Rusia ha confirmado un vertido de fueloil en el estrecho de Kerch, entre el mar Negro y el mar de Azov, de alcance todavía para determinar. El incidente se ha dado a consecuencia de un siniestro que ha afectado dos petroleros por un presunto "error humano" en medio de un temporal en estas aguas y que de momento se ha saldado con un marinero muerto, según las primeras investigaciones. Los barcos involucrados transportaban cada uno aproximadamente cuatro toneladas de combustible por el estrecho que separa la Crimea bajo control ruso de la región de Krasnodar. Uno de ellos, el Volgoneft 212, con 15 tripulantes a bordo, se ha hundido después de acabar partido por la mitad, según las imágenes difundidas en Telegram. El marinero muerto trabajaba en este barco de carga. El otro, el Volgoneft 239, con 14 tripulantes a bordo, de momento se encuentra a la deriva.
Un petrolero de la "flota gris" rusa (viejos barcos por las sanciones)se ha hundido y otro está dañado en el estrecho de Kerch por una ola
— Javi Cuesta (@Jglez360) December 15, 2024
El barco, botado hace 55 años, había sido recortado con una enorme soldadura en los 90 para operar solo en ríos
A ver quién asume los daños pic.twitter.com/ilzp2wjVlA
Un vídeo que circula en canales no oficiales de Telegram ucranianos y rusos muestra el barco de carga partido en dos, con agua derramándose por la cerca de la cubierta superior mientras grandes olas se balancean de un lado en el otro. La proa de la embarcación, que se puede ver en el fondo de la imagen, se ha roto y aparece justo por encima de la línea de flotación. Se puede ver a los miembros de la tripulación usando chalecos salvavidas mientras la cámara gira alrededor.
Fuentes de los servicios marítimos de búsqueda y salvamento han indicado a la agencia de noticias Interfax, una organización no gubernamental de Rusia, que las primeras investigaciones apuntan que el desastre se ha producido por un "error humano". Sin embargo, todavía está pendiente aclarar las circunstancias exactas del siniestro, ocurrido a siete kilómetros de la costa, "en medio de una fuerte tormenta a que no pudieron hacer frente las tripulaciones de los dos barcos". Las mismas fuentes ha asegurado que los dos petroleros, construidos entre 1980 y 1984, han sido concebidos únicamente como transportes fluviales capacitados para navegar cerca de la costa, y solo en condiciones tranquilas. "Una tormenta podría acabar provocando una tensión excesiva en el casco", han estimado.
El Ministerio de Situaciones de Emergencia ruso ha asegurado en un comunicado emitido por canales oficial que "el cuartel general operativo está funcionando. Más de 50 especialistas y 11 unidades de equipos ya están involucrados en la respuesta". El gabinete también ha informado de que "se está verificando más información" para conocer el alcance del accidente. En estos momentos, está evaluando el alcance de un "posible vertido de combustible".
Por su parte, la Fiscalía de Transportes de Novorossisk también está llevando a cabo una investigación, en este caso por un posible delito penal sobre el naufragio en que se habrían violado las normas de seguridad viaria y explotación del transporte marítimo. A estas alturas, queda pendiente ver quién asumirá la responsabilidad del desastre, que todo apunta que se ha dado por un error humano.
El posible papel de Ucrania
El ejército de Volodímir Zelenski ha atacado regularmente la infraestructura rusa en Crimea o en las regiones limítrofes. Ucrania está intentando recuperar el territorio después de que Rusia lo anexara al país ilegalmente en el 2014. De todos modos, no hay indicios que los incidentes estén relacionados con el conflicto.