Alemania, Europa, año 2024. Parece distópico, pero la policía de Berlín, tal como recogen varios medios alemanes, ha lanzado una advertencia de seguridad a las personas judías y gays para evitar algunos barrios de la capital, sobre todo en zonas bajo control musulmán, para evitar convertirse en víctimas de ataques antisemitas u homófobos. "Desafortunadamente, hay ciertos barrios donde hay mayoritariamente personas árabes que también simpatizan con los grupos terroristas", ha asegurado la jefa de la policía de Berlín, Barbara Slowik, al diario Berliner Zeitung. La máxima responsable de la policía ha pedido a los hombres que llevan kipá o que sean gays que "tengan más cuidado" en estos barrios de la capital de Alemania.

En toda la ciudad, según la misma Slowik, se han iniciado más de 6.000 investigaciones por ataques antisemitas desde hace un año, desde el sábado negro, el 7 de octubre de 2023, cuando Hamás lanzó un ataque terrorista a gran escala contra civiles de Israel causando más de un millar de muertos. De estas investigaciones, según las mismas fuentes, un millar han comportado acciones violentas contra las víctimas, un hecho que, evidentemente, ha hecho crecer la sensación de temor entre la comunidad judía en Berlín. Entre estos episodios claramente antisemitas están también los ataques que aficionados del Maccabi de Tel-Aviv recibieron en el multicultural barrio de Neukölln -controlado por población árabe y turca-, en Berlín, hace pocos días, cuando fueron agredidos por grupos ultras que gritaban a favor de Palestina y en contra de los judíos y de Israel.

La directora de la policía de Berlín, en esta entrevista al Berliner Zeitung, asegura que no hay "zonas prohibidas" para entrar a la ciudad, y que las personas judías y gays pueden moverse por toda la ciudad, aunque sí ha pedido más precaución en algunas zonas controladas por comunidades como la musulmana, y concretamente donde el radicalismo islámico ha tomado el control social.

Slowik también ha querido evitar "generalizar", pero no ha podido ocultar la creciente tensión instalada en este país que, actualmente, acoge más de 5 millones de personas musulmanas -un millón llegadas a Europa en los últimos diez años- y representan más de un 6% de la población. La jefa de la policía de Berlín acepta que son una minoría los que tienen simpatías con grupos terroristas como Hamás y que por eso, además de las investigaciones policiales, también es necesario que los judíos y los gays, que pueden ser objetivos de estos grupos incontrolados, tomen medidas de autoprotección.

Refuerzo de la protección también en Cataluña

Los ataques contra intereses de Israel y de la comunidad judía en toda Europa han aumentado en los últimos meses, después del ataque del 7 de octubre y la respuesta de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) contra Hamás y Hezbolá, también en Cataluña, donde los Mossos d'Esquadra, aunque no han lanzado advertencias similares, sí han reforzado de manera permanente la protección en el consulado en Barcelona y también en las sinagogas y escuelas con presencia judía.