El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, ha pedido este martes ante el Congreso de los Diputados que las empresas españolas, como Porcelanosa, dejen de hacer negocios con Rusia. Desde la empresa afectada han asegurado que todo ha sido "un problema de interpretación" porque afirman que desde que estalló la guerra en Ucrania "bloquearon la totalidad" de las transacciones comerciales con Rusia, entre otras cosas por las dificultades a raíz del bloqueo decretado por la Unión Europea. "En Rusia trabajamos con distribuidores y el problema es que el material que vendíamos hace meses puede seguir circulando", han publicado desde la cuenta de Twitter. Porcelanosa, en este sentido, ha lamentado que no puedan detener estas ventas que ahora se están haciendo con el stock que tienen guardado en Rusia.
La empresa que se ha visto interpelada por el discurso de Zelenski ha remarcado que desde el primer momento, se ha solidarizado con el pueblo ucraniano. Porcelanosa organizó una recogida de bienes para enviar a la zona de conflicto y tiene incluso un piso cedido por la familia ucraniana de uno de sus distribuidores en Ucrania. Zelenski ha pedido ante el Congreso de los Diputados a las empresas españolas que dejen de hacer "dejen de hacer negocio con Rusia". En concreto se ha referido a tres empresas: "Me quiero dirigir a Maxam, Porcelanosa y Sercobe y otras compañías que dejen de hacer negocios con Rusia". La segunda de estas firmas ha respondido inmediatamente negando la afirmación del presidente. En concreto, ha negado que haga ninguna acción con Rusia desde que estalló la guerra y que no tiene tiendas abiertas al país. La intervención de Zelenski ha sido aplaudido por todos los grupos, excepto por los diputados de la CUP, del BNG y Enrique Santiago (Unidas Podemos).
El líder ucraniano ha puesto el foco especialmente en Mariúpol, por el ensañamiento que ha habido, que ha comparado con el de la aviación nazi en abril de 1937 en Gernika. En este sentido, Zelenski ha recordado cómo sus habitantes se han visto sin comida, sin medicamentos y con toda la ciudad destruida. "Sólo han quedado escombros. El 90% de los edificios están derribados", ha constatado. Ha denunciado cómo el Ejército invasor ha bombardeado edificios, como el caso del teatro, donde sabían que se escondía la gente. "Rusia no busca la paz seriamente, y lo peor es que no sabemos cuánto puede durar la guerra", ha alertado.
También se ha referido al caso de Butxa, donde se han cometido "crímenes contra la humanidad", y ha asegurado que sus responsables tienen que ser juzgados ante la Corte Penal Internacional. Un Zelenski que ha subrayado que Rusia llevó la guerra a Ucrania mucho antes. "Estamos defendiendo nuestro Estado de la guerra desde el 2014, desde la ocupación de Crimea y el Dombas", ha asegurado. ¿"Qué quiere destruir el armamento ruso? La posibilidad de vivir sin dictadura, sin violencia de Estado, en democracia abierta, la posibilidad de convivencia en paz," ha añadido.