Fuerte bronca. Las fiestas celebradas en Downing Street durante la pandemia y en las cuales participó el primer ministro Boris Johnson "no se tendrían que haber permitido". Así consta en el informe elaborado por la alta funcionaria Sue Gray dado a conocer este lunes, que también asegura que hubo "errores de liderazgo y de juicio" en la sede del ejecutivo británico. Aunque algunas de las reuniones sociales aún están siendo investigadas por la policía, el documento es muy rotundo cuando afirma que "hay lecciones importantes a sacar de estos acontecimientos que tienen que ser tratadas inmediatamente en el gobierno y eso no necesita que se acaben las investigaciones policiales".
"En el contexto de la pandemia, cuando el gobierno pedía a los ciudadanos que aceptaran restricciones de amplio calado en sus vidas, algunos de los comportamientos en torno a estas reuniones sociales son difíciles de justificar", señala Gray en el documento de doce páginas. Un informe que añade que "algunos de estos encuentros representan un grave fracaso en la observación, no solo de los estándares que se esperan de los que trabajan en el núcleo del gobierno, sino también de los cuales se esperaban entonces de toda la población". "Hubo errores de liderazgo y de juicio por diferentes partes en el Número 10 de Downing Street y en el Ministerio del Gabinete en varios momentos. No se tendría que haber permitido que algunos de estos acontecimientos tuvieran lugar. Y otros no se tendrían que haber permitido que se desarrollaran como lo hicieron", según la investigadora.
Un informe incompleto
Gray ha recordado que la Policía Metropolitana le dijo que solo sería apropiado hacer una referencia mínima a las reuniones que ellos investigan. "Eso desafortunadamente significa que estoy extremadamente limitada en lo que puedo decir sobre estos acontecimientos y no es posible ahora facilitar un informe significativo que analice la cantidad de información factual que he conseguido recoger", ha subrayado. Una de las presuntas fiestas que se han investigado se celebró el 13 de noviembre de 2020 en el apartamento del Número 10 de Downing Street, que podría apuntar a un encuentro en la residencia oficial del Johnson, lo que haría más difícil cualquier argumentación del primer ministro para intentar evadir su supuesta responsabilidad.
Johnson ya ha recibido el informe, que ha sido publicado parcialmente este lunes, sin incluir las partes que están siendo investigadas por la policía. Concretamente, medios británicos han informado de que Gray "ha proporcionado una actualización sobre sus investigaciones al primer ministro". Downing Street se ha comprometido a publicar el informe con rapidez, y así lo ha hecho. Johnson ha anunciado este lunes ante el Parlamento que emprenderá cambios en el funcionamiento interno del gobierno, porque "pedir perdón no es suficiente", después de conocer el informe parcial del alta funcionaria Sudo Gray sobre las fiestas en Downing *Street durante la pandemia. El primer ministro ha asegurado que el más importante ahora es "aprender" de los errores cometidos con la celebración de las fiestas, y ha afirmado que enmendará los problemas de estructuras y de rendición de cuentas que hicieron posible estos "fallos de liderazgo" que critica el informe de Gray. "Primero quiero pedir perdón por las cosas que no hicimos bien, y también por la forma en que este asunto se ha gestionado, pero no es suficiente con pedir perdón. Es un momento para mirarse en el espejo y tenemos que aprender", ha señalado el primer ministro en la Cámara de los Comunes (Baja).