El ministro francés de Justicia, Gérald Darmanin, ha lanzado un programa para crear de aquí a 2027-2028 de 3.000 nuevas plazas en prisiones prefabricadas para construirlas más rápidamente y responder a la saturación actual, pero también con un coste inferior. En declaraciones publicadas este lunes por el diario Le Figaro, Darmanin explica que su intención es poner de pie "quince estructuras de semilibertad" con 1.500 plazas y "diez estructuras dedicadas a las penas cortas".

La primera de estas prisiones modulares tendría que entrar en servicio "el otoño del 2026", según los cálculos. Su apuesta por este tipo de construcción se explica porque actualmente para levantar una prisión hacen falta siete años por todos los trámites que hay que cumplir y las condiciones impuestas a este tipo de edificios, cosa que se tendría que aligerar con el sistema de prefabricados.

¿Cuánto vale una plaza de prisión?

Por otra parte, mientras que una plaza de prisión le cuesta al contribuyente 350.000 euros, el ministro confía en "poder bajar el coste, significativamente, a 200.000 a ritmo de crucero." "Construiremos tantas plazas como estaba previsto, pero más barato y más rápido", asegura el ministro. El plan gubernamental contemplaba crear 15.000 plazas al horizonte del 2027, pero se había revisado la ambición a la baja.

Estas prisiones prefabricadas estarán dirigidas a los internos considerados menos peligrosos, entre los cuales se incluyen los 15.000 encarcelados por delitos de tráfico, los 18.000 por violencia conyugal y los 25.600 que tienen pendiente de cumplimiento menos de un año de la condena. El plan del ministro de Justicia tiene un coste estimado de unos 600 millones de euros en tres años e implicará la suspensión o incluso el abandono de otros proyectos que se encuentran en fase de estudios o para los que se buscaban solares.

Prisiones llenas

Más de 74.000 personas estaban encarceladas en Francia hasta el 1 de julio del 2023, según datos del Ministerio de Justicia. Es un récord histórico, y una cifra que podría aumentar las próximas semanas, con consecuencias dramáticas para las condiciones de encarcelamiento. A pesar de todo, oficialmente el país dispone únicamente de 60.666 plazas a sus centros de reclusión. Traspasado este límite con la cifra actual, la densidad carcelaria global en la nación se eleva a 122,8%, versus 118,7% en el mismo periodo del 2022. En algunas regiones, por ejemplo en Perpinyà, en el sur de Francia, esta tasa sobrepasa, incluso, el 200%, alcanzado el 212%.