La rebelión del grupo de mercenarios Wagner, liderada por Yevgueni Prigozhin, ha dejado al presidente ruso, Vladímir Putin, tocado. Como mínimo. Algunos analistas constatan que se lo ha visto más débil y también con discursos "vacíos" y "repetitivos". Las preguntas radican ahora en intentar averiguar qué se puede esperar del líder del Kremlin después de la inestabilidad que ha comportado el levantamiento de los mercenarios este sábado. Lo que es cierto, sin embargo, es que todo ha comportado más preguntas que respuestas y que faltan datos para acabar de entender la magnitud de las circunstancias.
🗣️ Las palabras vacías de Vladímir Putin después de la rebelión de las tropas de Wagner
En este sentido, da la sensación que a Putin se le está rompiendo la mano de hierro. Así lo ve Miguel Vázquez Liñan, experto en propaganda rusa y Coordinador en el Grupo de investigación en Memoria Histórica y Comunicación y profesor de la Universidad de Sevilla. Detalla que, con los datos que han trascendido, unos 25.000 soldados que habrían hecho caer aviones del Kremlin serán indultados y se les ofrecerá o bien ir a la guerra o irse y sin cargos. "Es una señal de debilidad, hacen falta soldados para la guerra".
Todo es incierto. "Cada movimiento que haga Putin será interpretado en relación con eso. Prigozhin no se ha puesto sol. Alguien de Moscú podría estar detrás de este asunto. A lo largo de los años, Putin ha creado redes que dependían de él para hacer carrera hacia el poder. Ahora, se ha formado una clase muy influyente".
De esta manera, resalta que Prigozhin tiene el poder que tiene gracias a Putin. Ahora bien, insiste en que la guerra podría haber hecho explotar las relaciones que él mismo había tejido. "La debilidad de un ejército parece que está muy igualada con Ucrania, en este sentido, hay una serie de grupos que hacen propaganda a su alrededor". Así, constata que Prigozhin podría tener más gente a favor suyo. "¿Si decimos que son nazis, en qué estamos esperando? ¿Cómo puede salir tan mal? Creo que hay aún parte de la población que, a pesar de no ser numerosa, está apostando por este mensaje". Subraya que "el ejército ruso ha sido desprestigiado por el mismo Prigozhin, y está la opinión que si se va a hacer una guerra, se tiene que ir a hacer bien. Y ellos la hacen bien. Eso podría explicar el hecho de que no haya habido resistencia, porque además, todas las tropas están en Ucrania. No había nada en Rusia. En Moscú, hay gente intranquila y eso es desfavorable para Putin. Sería imposible pensar en lo que ha pasado si no fuera porque la debilidad está allí". Vázquez Liñan recuerda que para decir "guerra" en Rusia puedes enfrentarte a condenas de años de prisión y que Prigozhin se refiere como guerra y dice barbaridades sobre el ejército y no le pasa nada.
La difícil posición de Putin: ¿podrá remontar?
"En este mismo momento, se ve difícil, pero en una guerra, las expectativas nacen y mueren muy rápidamente. La guerra parece que se está estancando y ahora parece difícil remontar la imagen". Ahora bien, el experto constata que estos días Putin aparecerá muy por todas partes. "Estará a todos los consejos de seguridad, se reunirá con los militares... no puede dar la sensación que él manda las operaciones porque si van mal, será culpable, pero sí que tendrá que dar una imagen de control". Así, pone énfasis en el hecho de que Putin no se esconderá de reñir a sus ministros en público si hacen cosas que no van bien.
Y es que en este momento, es bastante probable que Prigozhin, a pesar del acuerdo para exiliarse en Bielorrusia y que se haya cerrado su caso, no esté tranquilo. Vázquez Liñan constata que es bastante seguro de que tampoco nadie querría ser Putin. "Putin no parece muy fuerte. Seguramente es el su peor momento. Ahora bien, si hay dudas sobre su popularidad, pronto saldrá una encuesta diciendo que los rusos lo estiman en un 90%".